Review WWE WrestleMania 39: un cierre bochornoso al evento mas grande del año

Primer fin de semana de abril, una fecha que para muchos significará que llegan las vacaciones de Semana Santa, fiesta de la buena y descansito. Para mí también lo es y bien que lo agradezco, pero también es la llegada del evento mas glamuroso y espectacular de todo el pro wrestling, este fin de semana tenemos el grandísimo show llamado WrestleMania. Da igual si eres fan acérrimo de la WWE, si eres como yo y te gusta mucho mas otro tipo de pro wreslting y de esta compañía pasas bastante, incluso da igual si no eres fan pero sí que veías pressing catch en la tele cuando eras pequeño, este es el día magno del pro wrestling, o como lo llama WWE, el espectáculo mas grande del entretenimiento deportivo. Este año se celebraría bajo los focos de Hollywood en una edición de dos noches con una cartelera mas que interesante tanto por encuentros como por el cierre de grandes historias. Así que hoy vengo a hablar de WrestleMania 39, un festival de luces de neón que pudo ser legendario y acabó siendo la misma cosa mediocre de siempre.

Antes de entrar en harina, aquí van resultados de los combates que se han quedado fuera de la review por ser o menos trascendentales o cortos e improvisados:

The Street Profits derrotaron a Alpha Academy, The Viking Raiders, y Braun Strowman & Ricochet en el WrestleMania Showcase Match Masculino donde destacaron las actuaciones de Chad Gable y Montez Ford.
Ronda Rousey & Shayna Baszler derrotaron a Chelsea Green & Sonya Deville, Liv Morgan & Raquel Rodríguez, y Natalya & Shotzi en el WrestleMania Showcase Match Femenino en un combate de muy baja calidad.
Pat McAfee derrotó a The Miz el sábado en un paripé llamado combate corto, todo pactado por Snoop Dogg y con la intervencion de George Kittle, un jugador de futbol americano que no conozco porque no veo ese deporte.
Snoop Dogg derrotó a The Miz el domingo en otro combate corto improvisado debido a que el rival original, Shane McMahon, se destrozó la pierna durante el encuentro, en lo que es uno de los segmentos mas bochornosos que recuerde en un WrestleMania.

UNITED STATES CHAMPIONSHIP: AUSTIN THEORY © VS JOHN CENA

Empezaba la primera noche de las dos de este WrestleMania con el combate que todos consideraban el “paso de antorcha” del evento, que de eso os voy avisando que tuvo entre cero y nada. El joven campeón estadounidense defendía su campeonato frente a la leyenda de John Cena, que tristemente ahora en la misma fase que The Rock tuvo en 2003-2004 en WWE, apareciendo de manera esporádica mientras su carrera en Hollywood empezaba a marchar fuerte. Un combate que se vendió como un relevo generacional y que tuvo una construcción flojísima: Cena aparece en RAW, humilla verbalmente a su rival y desaparece hasta este día. Construcción floja, pero si el combate es bueno no me voy a quejar.

El problema es que no lo fue porque digamos que, en cierta manera, el bueno de Cena llegó, hizo cosas durante poco más de 10 minutos, cogió su cheque y se fue para casa. Para John no era necesario que este combate fuera algo más, ha tenido una carrera llena de éxito donde en varias etapas de esta misma ha demostrado que es un grandísimo talento no solo en esto del “entretenimiento deportivo” sino también en el pro wrestling. La cosa es que para Theory no, porque tras unos años donde no había demostrado absolutamente nada y que se le veía lejos de ese puesto de “futura cara de la compañía” que se le atribuía este combate era vital. Tenía que mucho haciendo no solo un gran combate sino aprovechando una victoria sobre alguien como Cena que estaba listo para todo este foco, pero nada de nada. No solo no hizo eso sino que ganó con un golpe bajo con un árbitro noqueado justo después de que Cena le hiciera rendirse con un STF. Final más que visto para un encuentro más que soso.

SETH ROLLINS VS LOGAN PAUL

Llegaba un combate sumamente interesante, el sorprendente y carismático Logan Paul se enfrentaba Seth Rollins, el workhorse de la compañía y un talento espectacular. Me salto la previa y voy directo al asunto porque madre mía sí que estaba enchufado para esto. La culpa de mi hype es la entrada al ring de ambos luchadores, un Logan Paul absurdamente chulesco llegando en tirolina con un temazo de entrada y aprovechándose del espectacular escenario de esta edición de WrestleMania, incluso siendo acompañado al ring una mascota disfrazada de una botella de su empresa PRIME. Seth Rollins no fue de menos, se llevó a un director de orquesta para que condujera a los fans y cantaran al unísono su más reconocido tema y su entrada al ring daba hasta escalofríos de lo chula que era.

Y la lucha siguió perfectamente ese espectáculo creado justo antes de ella, divertidísimo encuentro. Logan Paul sorprende lo bueno que es para lo poco que lleva, es ágil, veloz y carismático, además de que mejora cada vez que sube al ring. De Seth poco que decir, ya nos le conocemos bien. Un combate divertido, dinámico y emocionante de principio a fin con un público enchufado y muchos momentos geniales. Uno de ellos contó con nuestra botellita de PRIME que reveló ser KSI, amigo de Logan y el otro dueño de la marca, quien se comió un Diving Splash accidental de Paul hacia la mesa de comentaristas en un spot perfectamente realizado. Un encuentro divertido y emocionante que culmina con la victoria de Rollins tras cortar un Coast 2 Coast de Logan Paul con tremenda Superkick seguido de su característico Stomp.

BECKY LYNCH, LITA & TRISH STRATUS VS DAMAGE CTRL

Primer combate femenino de toda la velada de los cuatro que hay programados a lo largo de todo el evento. Se enfrentaba la facción de Damage CTRL a las campeonas femeninas por parejas, Becky Lynch y Lita, y a la legendaria miembro de la división femenina Trish Stratus. Mi opinión sobre este combate es simple, la WWE ha pensado que mejor meter dos leyendas de la división en WrestleMania que defender un campeonato que ha sido una broma desde el día de su nacimiento. Pero bueno, si la lucha está bien por mi ningún problema. La cosa es que no lo fue, no fue algo horrible pero tampoco nada sensacional. La gran mayoría de trabajo lo hicieron tanto el grupo heel como Becky Lynch mientras que Lita y Trish Stratus tiraron de momentos reducidos que denotaron que ambas tuvieron sus mejores días atrás, sobre todo Lita. Pero un WrestleMania sin alguna leyenda ganando un combate no es WrestleMania, así que el equipo de Lynch, Trish y Lita obtuvieron la victoria en un encuentro bastante meh donde el público que tan animado estuvo durante los dos días del evento estuvo bastante silencioso.

REY MYSTERYO VS DOMINIK MYSTERIO

Ahora tocaba un duelo familiar con mucho odio y tensión de por medio, Rey Mysterio se enfrentaría a su hijo Dominik para intentar frenarle los pies y detener sus faltas de respeto de una vez por todas. Desde la traición del hijo para unirse a Judgement Day no ha habido más que tensión entre los dos, sobre todo cuando Dominik hacía todo lo posible para que su padre perdiera su calma. Pero todo llegó a un final y el enmascarado, tras tanta falta de respeto hacia él y, sobre todo, hacia el resto de su familia, quiso pararle los pies a su hijo y aceptaba enfrentarse a él en el showcase de los inmortales. Encuentro que tiene en la previa una entrada al ring de Dominik como si de un asesino en serie se tratase (esposado y rodeado de policías) portando una máscara como las de su padre a modo de falta de respeto. Por parte de Rey tuvimos algo espectacular, entrado al ring con un pedazo buga conducido por nada menos que Snoop Dogg mientras sonaba “Nuthin' But A ‘G’ Thang” primero y posteriormente el legendario tema de Eddie Guerrero “Lie, Cheat & Steal”.

Empezaba esto también bien. Un encuentro que estuvo bastante entretenido la verdad, Dominik como heel sabe suplir las mil y un carencias que tiene y que parece que nunca se van y Rey Mysterio es quien es, siempre que está el algo es bueno como mínimo. Tuvo sus momentos curiosos, como Rey azotando con un cinto a su hijo, las trampas de Judgement Day y la victoria final vía 619 del enmascarado gracias a una ayudita de Bad Bunny, todo esto mejorado por 10 debido a un público increíblemente enchufado. Eso sí, todo esto tuvo una gran nota negativa, que el combate fue patrocinado por Cinnamoji Toast Crunch, y ver un combate con alta carga emocional como este tener de fondo no solo el logo de la empresa si no un jodido cereal enmascarado en ringside pues mucha gracia no me hace. Que buena acción publicitaria, “si quieres pegar a tu hijo igual de bien que Rey Mysterio compra nuestro cereal” debió pensar algún iluminado. Aun con la chorrada esta, me lo he pasado como un enano, tenga 7-8 o 24 años, un combate de Rey Mysterio siempre entra perfecto entre pecho y espalda.

SMACKDOWN WOMEN'S CHAMPIONSHIP: CHARLOTTE FLAIR © VS RHEA RIPLEY

Ahora sí que si teníamos delante el primer combate por un campeonato femenino de todo el fin de semana, Charlotte Flair defendía su titulo femenino de SmackDown contra Rhea Ripley, la ganadora del Royal Rumble. No se si ha habido una profunda y desarrollada rivalidad entre estas dos en estos meses previos a WrestleMania, solo se que Rhea ha estado envuelta en el embrollo familiar de la familia Mysterio y que Charlotte pues mucho no necesita hacer ya que pues su nombre tiene mucho poso dentro de WWE. Yo estaba hypeado, mas por el encuentro por el otro campeonato de mujeres, pero leñe estas dos competidoras tienen historial detrás como para hacer algo de muy alta calidad.

De momento empezaba bien, se plantaban dos de las miembros de la división femenina con más ego y chulería que hay, además de ser dos wrestlers con poderío físico y talento a raudales. Me hizo gracia y me gusto un poco que Flair sacase su lado de villana a pesar de ser la babyface de este combate. El resto de combate, durante 23 minutos y 34 segundos, fue de un estilo mas parecido al estilo japones del “King’s Road” que tanto me gusta: comienzo lento pero firme, un dominio parejo y escalando en ritmo y en intensidad según se acercaba el final. Sin necesidad de hacer cosas increíblemente deslumbrantes a la vista realizaron una actuación basada en cosas sencillas pero muy efectivas como el uso brutal de golpes simples de antebrazo o patadas y una brutal retahíla de distintos tipos de suplex. Tal fue el nivel que las patadas parecían saltar empastes y algún que otro German Suplex pretendía acercarse a esos que había en AJPW en los 90 y que parecía que alguien iba a partirse el cuello. A este gran y suculento plato le sumas el picante de los falsos finales que te dejaban al borde del infarto, una fanaticada que otra vez resonaba de manera espectacular y una secuencia final sublime te queda un plato digno de un par de estrellas Michelin. Un plato que cerró con Rhea Ripley venciendo a Charlotte Flair gracias a un Riptide desde la segunda cuerda. Muy buen encuentro.

UNDISPUTED TAG TEAM CHAMPIONSHIP: THE USOS © VS SAMI ZAYN & KEVIN OWENS

Llegaba el main event de la primera noche de WrestleMania 39, el cierre de la mayor y mejor historia de la WWE de los últimos años, un cierre que debería de haber sido otro pero que este tampoco estaba mal. Sami buscaba venganza, y ante el fallido intento de doblegar a Roman Reigns se encontró con que los Usos también le abandonaban, incluido su grandísimo Jay. Ante esto solo le quedaba una cosa, intentar arrebatarle los campeonatos por parejas junto a su mejor amigo y su mayor rival durante casi 20 años, Kevin Owens. El ansiado y esperado momento de Zayn llegaba, no era el cierre esperado pero era uno que se acercaba.

Empezaba todo esto, y tras la llegada al ring de los campeones era el turno de un Sami Zayn y Kevin Owens que eran llevados en volandas por los fans y que portaban en sus atuendos grandes dedicatorias a PWG y Super Dragon. Y qué decir del encuentro, es que estamos en la maldita era dorada del wrestling por parejas. Ya sean los Young Bucks, FTR, los siempre eternos hermanos Briscoe, Aussie Open, Lucha Brothers, The Usos, da igual, vas a ver sea donde sea wrestling por parejas de calidad. 25 minutos sublimes de principio a fin que tuvo de todo, incluida una recta final de infarto que cada cuenta de tres fallida parecía que me iba a dar un infarto en un festival de resiliencia pura y dura de los aspirantes a base de puro corazón. Un enfrentamiento emotivo terminó de la manera más sentimental posible, con Sami Zayn por fin dando el paso y cubriendo a Jey Uso tras tres Helluva Kicks para coronarse junto a Kevin Owens en campeones por parejas y cerrar la que ha sido una de las mejores noches en las casi cuarenta ediciones en toda la historia de WrestleMania. Un final emotivo, esos dos chavales que dieron todo lo que tenían en un pequeño recinto de Reseda llegaron a la cima, incluso acordándose y agradeciendo todo a PWG, a ROH y a las personas que estuvieron con ellos allí, incluidos Jay y Mark Briscoe. Que gran cierre señores.

BROCK LESNAR VS OMOS

Empezaba la segunda noche del fin de semana de WrestleMania y tenía la tarea de superar el altísimo listón del primero de los dos días. Por cartelera podría llegar a, al menos, quedarse cerca o igualar lo visto el día antes, superar sería difícil y tendríamos que esperar. Para esa tarea contábamos con el combate entre Omos y Brock Lesnar, encuentro que nadie quería ver salvo el viejo decrépito de Vince McMahon, pero aquí estamos. Y si el opener del día anterior fue malo, este fue peor, y fíjate que el nuevo Brock Lesnar barbudo y con coleta mola una maldita barbaridad, pero vamos esto fue tétrico. Paso de perder el tiempo y desarrollar profundamente un resumen para este encuentro porque lo que pasó fue que Brock llegó, hizo el paripé por poco menos de cinco minutos, recogió un cheque gordo y se volvió a su rancho en Canadá. Es más, me juego el brazo a que la idea de que este fuera el primer combate fue del propio Lesnar, así se largaba cuanto antes.

INTERCONTINENTAL CHAMPIONSHIP: GUNTHER © VS DREW McINTYRE VS SHEAMUS

Tras un combate de parejas femenino más que lamentable (no comentado por motivos explicados previamente) llegamos al que va a ser el festival de piñas por excelencia del fin de semana y no el Brock VS Omos del principio. Se enfrentan en una triple amenaza tres de los luchadores con mayor pegada de toda la WWE si no son los que más, y si a esta buena premisa le sumas que, en verdad, cualquiera de los tres sonaba creíble y realista como el hombre que saldría del recinto con la correa te queda algo con muy buena pinta.

Empezó como el buen festival de piñas que parecía que iba a ser, Claymore de Drew a Gunther nada más empezar y ale a partirse la cara el escoces y el irlandés. Poco duró esto, porque el campeón regresaba y destrozaba a ambos oponentes con dos de sus característicos chops al pecho que capaces son de partirte el esternón. Y por poco más de 16 minutos y siguiendo lo establecido, se convirtió en el mayor festival de piñas que he visto en muchísimo tiempo. Un constante intercambio de todo tipo de golpes tan sonoros y tan brutales que un escalofrío recorría mi cuerpo cada vez que veía uno. Como fan de esos legendarios combates de NJPW donde los luchadores se destrozaban unos a otros solo por ser campeón NEVER, este encuentro me lo he gozado como niño chico. Y ya no solo me lo he gozado, es que simplemente es el mejor encuentro de todo el fin de semana igualado al main event del día anterior. Pero no solo fueron castañazos espectaculares, también hubo momentos espectaculares, sobre todo el momento del combate en el que Sheamus repartió varias de las Brogue Kicks más duras que he visto para casi alcanzar la victoria en dos ocasiones distintas. Igual hizo Drew justo después, conectó la más brutal Claymore Kick que he visto para casi ganar, emocionante es quedarse corto. Lo que sí que fue espectacular fue la secuencia final, Brogue Kick de Sheamus sobre Drew y cuando parecía que iba a ganar Gunther cae sobre ellos desde la tercera cuerda en un impacto espectacular, Powerbomb a Sheamus sobre un McIntyre que intentaba levantarse y otra sobre el escoces para retener en una de los mejores combates a tres esquinas que he visto en mi vida.

Llega el combate por campeonato femenino de la noche, si el primer día luchaban por el de SmackDown ahora era el turno del de RAW. Si el primero de los dos me creaba algo de expectativa y la superó con creces, a este simplemente le tenía unas ganas monstruosas. Entre que Asuka me encanta y encima había recuperado esa personalidad de payaso macabro que usaba y tanto molaba en Japón y que Bianca Belair es lo mejor que tiene la WWE en cuanto a división femenina pues hype había. La cosa es que no alcanzó las expectativas puestas, quizás fue el menor tiempo que tuvieron respecto al Flair contra Ripley, que esta segunda noche no estaba yendo tan bien (salvando el combate anterior a este), que el resultado no era el que esperaba o que simplemente el listón estaba muy alto. Repito, no es un mal combate, es más, me parece bastante bueno pero las circunstancias que le rodearon y las expectativas hicieron que perdiera puntos. La cosa positiva es que Bianca Belair es la numero uno, como el John Cena de la división. Lo malo es la derrota de Asuka y un posterior tweet que hace indicar que abandonará la compañía.

EDGE VS FINN BÁLOR

Tras uno de los paripés más bochornosos que he visto en un show de lucha libre protagonizado por Miz, Snoop Dogg y la pierna destrozada de Shane McMahon, llegábamos a la vendetta definitiva, o así nos lo vendieron. Llegábamos al final de la rivalidad entre Finn Balor y Edge que tomaría un final definitivo en un combate dentro de la jaula del Hell In A Cell. Un combate con cero ganas y, por ello, no muchas expectativas debido a un no muy atractivo último año de Edge y a un Finn Bálor que sigo manteniendo la opinión de que su etapa en WWE no ha sido más que mediocridad seguida de más mediocridad por muchos y distintos factores. El grandísimo Russell Crowe nos subía las emociones con un video, Edge entraba al ring con South Of Heaven de Slayer sonando y la personalidad de “The Demon” de Finn Bálor volvía. Si al final la presentación tan cinemática y espectacular de WWE en estos shows grandes funciona de diez para que te pique el gusanillo, veremos si ambos wrestlers alcanzaba esta recién ganada expectativa.

A ver como os lo explico, si el color rojo estúpido que tenía antes la celda ha sido desechado pero ahora las armas son de color rojo o morado pues buena pinta no tiene. Ni un minuto y ya estaba diciendo “me c*go en todo esto no es posible”, pero bueno podría ir a mejor, solo son objetos inanimados pintados con colores feos y estúpidos, pudiste pasar por alto en gran medida lo de los cereales en el combate de Rey Mysterio pues esto también se podrá pasar. El problema es que no remontó por una combinación de distintos factores. El primero es que claramente el alter ego de demonio de Bálor no funciona ni es creíble, el irlandés se transforma en alguien agresivo y con altas dosis de dolor pero se tiene que detener el combate cuando este empieza a sangrar. El segundo es Edge, se está viendo que al final Christian sí que era el mejor de la dupla, que si tuvo tanto éxito fue por una gran cantidad de carisma que parece que ahora ha desaparecido. El tercero es el propio combate, parece que Hell In A Cell en estos últimos años ha dejado esa espectacularidad y violencia características para ser solo un combate con armas más entre tantos que hay. No es un encuentro horrible pero tampoco es una maravilla, además de que hay que sumar el ya mencionado profundísimo corte de Bálor que causó una pausa más que anticlimática pero nada reprochable, lo primero y más importante siempre es la salud de los participantes. Lo dicho, combate bien, sin más.

Hora del main event, y que pedazo de evento principal tenemos. Se enfrentaban el invencible Roman Reigns contra el hijo prodigo Cody Rhodes, este con una gran historia personal detrás. Tras abandonar AEW porque, en verdad, estaba en la absoluta irrelevancia por distintos motivos, quiso probar suerte de nuevo en WWE y le funcionó a las mil maravillas. Una rivalidad con Seth Rollins que le vino a las mil maravillas porque se ganó a los fans tras luchar con un músculo pectoral completamente desgarrado, seguida de un regreso triunfal y un camino a la cima que todos amaban. Era la gran oportunidad, por fin podría hacerse con el campeonato de la WWE que tanto tiempo persiguió y nunca alcanzó, un cierre a una gran historia personal. El combate llegaba, y tras un buen paripé con los introducidos al Salón de la Fama, chorrocientos anuncios, un resumen innecesario de la entrada de Seth Rollins del día anterior, unos videos a modo de presentación del combate innecesariamente largos y dos entradas al ring que menos de 10 minutos no duraron, llegaba el cierre a esa grandísima historia.

Y que os voy a decir, salvo que vivas debajo de una roca o no estés para nada al día con la WWE sabes lo que pasó, cual fue el final y solo puedo decir “otro día la misma mierda”. El combate en sí estuvo bastante bien, no fue una cátedra ni tampoco algo espectacular pero fue lo necesario para que un enfrentamiento donde el peso de la trama y el peso emocional hacían todo el trabajo. La incertidumbre de ver casi ganar o casi perder a Cody Rhodes le daba ese puntillo emocionante, incluso en la recta final esa intervención tanto de los hermanos Uso como de los recién coronados campeones Sami Zayn y Kevin Owens le dio más emoción aun. Todo esto se fue a la basura en un final tanto anticlimático como controvertido. Cody Rhodes buscaba conectar su Cross Rhodes y tras media hora buscándolo y acercándose lentamente al esquinero, Solo Sikoa conectó un Samoan Spike mientras Paul Heyman distraía al árbitro, Spear y final con Roman Reigns como campeón. Un suspiro de decepción final y silencio total. Se acabó, una de las grandes historias de año acababa así.

Decir que el final es un jarro de agua fría es quedarse corto, es posiblemente el más decepcionante visto en muchísimo tiempo. No solo fue el final per se, fue que una vez más la WWE fallaba en dar un cierre satisfactorio y lógico. Porque es un hecho que la compañía se ha encerrado en un plan sin salida con Roman Reigns porque no son capaces ni de quitarle los campeonatos ni de separarlos, y ya no es que sean incapaces, es que sí que son capaces de hacerlo pero fallan siempre. Tuvieron la oportunidad con Drew McIntyre en Clash At The Castle, podrían haber cerrado la mejor historia vista en WWE en mucho tiempo pero hicieron perder a Sami en Toronto, y cuando parecía que todo iba a cerrar perfecto, que Cody iba a tener su merecido gran momento, que se iban a cerrar dos historias de manera perfecta en el escenario perfecto va y pasa esto. Ahora mismo no hay excusa posible que Triple H pueda sacar a la palestra, no hay nadie que sea lo suficientemente creíble para quitarle los campeonatos a Reigns y no hay ningún motivo para alargar más aun un reinado que ha sido largo de manera artificial y repetitiva. Error garrafal para cerrar una segunda noche decepcionante a mas no poder. Podía haber sido un WrestleMania legendario y, al final, todo al garete.

Un WrestleMania que empezó en su primera noche como firme candidato a ser uno de los mejores de su historia y acabó siendo la misma decepción de siempre. Una primera noche espectacular y una segunda con solo un combate destacado y el resto mediocre, sobre todo el final del show. Una vez más se brindaba ese espectáculo lleno de luces, famosos y presentaciones rimbombantes que a la WWE se le da tan bien en estos eventos y que son muy del agrado de los fans. Parecía que por fin a todo ese elemento de espectáculo se le sumaba un trabajo dentro del ring a la altura, pero la noche del domingo fue decepcionante. Esas cantidades ingentes de anuncios, videos, paripés innecesarios con The Miz y famosetes varios sentaban menos mal cuando los encuentros eran muy buenos, pero la segunda noche fue infumable a pesar de que hubo cosas interesantes y/o de grandísimo nivel. WWE tiene un problema gordísimo, le cuesta horrores desarrollar historias interesantes y cuando lo consigue las cierra de la peor forma posible. Entiendo que en el “sports entertainment” lo que importa es la espectacularidad y lo que entra por la vista, pero si a eso le añades buenas historias y grandes combates te queda algo sublime. Lejos queda esa etapa maravillosa de 2011-2018, el futuro pinta feo, mas ahora con la compra de Endeavor (dueña de UFC) y el regreso de Vince McMahon como el jefe creativo. Veremos qué pasa, yo de momento no vuelvo a WWE, estoy feliz con AEW y NJPW. Espero que hagan las cosas bien y hagan televisión de calidad, pero de momento tiene pinta de que ese no es el caso.