Review F1 23: de regreso a esta saga

La fiebre de la 33 hace estragos. Ha contagiado a antiguos fans que regresan, a los más nuevos que han entrado por las coñas de Twitter o por DTS y, sobre todo, ha pillado muy fuerte a aquellos que llevamos viendo la F1 desde que tenemos memoria. Ver al Nano tener un coche que no es un tractor bielorruso con problemas para enganchar dos rectas seguidas es algo increíble que nos hace soñar con esa victoria y, por qué no decirlo, le da más emoción a una competición que ha tenido su buena dosis de picante en esto últimos años gracias a carreras espectaculares y a rivalidades de alta tensión. Bajo ese pretexto llego yo a esta situación denominada “comprarse el F1 tras llevar sin jugar varios años". Quiero volver a pasármelo bien conduciendo un coche de Formula 1, así que tras pasar por caja con este F1 23 os traigo mi opinión sobre la última entrega de la saga de videojuegos correspondiente a la categoría reina de la automoción.


Mi primera toma de contacto tras cuatro años sin tocar un juego de esta saga (obviando las vueltas de prueba para configurar cositas) fue esta segunda entrega de Braking Point, la nueva historia de EA para esta saga de juegos deportivos. Bastante absurdo empezar por la segunda parte sin haber jugado la primera pensareis, pero ahí está Codemasters para salvar el día y explicarte todo lo anterior con un resumen cortito y más claro que el agua de todo lo ocurrido en la primera parte. Con todo esto explicado, la historia se centra de nuevo en Aiden Jackson, piloto que se sentará junto a su viejo rival Devon Butler en los asientos de Konnersport, la undécima y nueva escudería de la parrilla financiada por Butler Global, empresa de Davidoff Butler, padre de Devon. Por otro lado tendremos a Callie Mayer, firme candidata a ser la primera mujer en ganar la F2 y, por ende, tener serias posibilidades de ganarse un asiento en F1. La historia transcurre entre las temporadas de 2022 y 2023 en las que vemos un conjunto de distintas historias de las que seremos parte manejando a los tres pilotos anteriormente mencionados: la frustración por creer que mereces estar en un equipo mejor, lidiar con una retirada forzosa, problemas familiares y el pelear por la supervivencia de un equipo.

La historia está bastante bien, y aunque recaiga en clichés y tramas recurrentes en este tipo de historias te entretiene durante las cinco horas aproximadas que dura. Un modo campaña que mezcla distintos elementos y se inspira en historias conocidas de la F1 como son la rivalidad de dos pilotos del mismo equipo, el día a día de equipos de financiación privada como Andretti o la pelea de no morir como Manor, además del soplo de aire fresco que es tener una mujer pilotando en F1. Una historia entretenida combinada con un gameplay agridulce, muy entretenido en muchos momentos y muy pesado en otros. Entretenido es por su formato de completar trozos de carrera intentando cumplir unos objetivos concretos dentro del marco que da la historia, además de poder correr también en F2. Lo doloroso es realizar carreras enteras (gracias a dios que en formato corto) y correr en una dificultad absurdamente baja incluso si lo pones en el nivel más alto. Además está el añadido de las entrevistas y las estadísticas resultantes de estas y de cumplir objetivos que, en realidad, solo sirve para desbloquear más respuestas que dar a la prensa que harán subir más esas stats. En resumen, una base muy divertida con una buena historia que por momentos se ve empañada por ciertas decisiones no muy correctas y elementos que en realidad no necesitan estar.


Vayamos a la salsa, a lo que importa, el gameplay. Para dejarlo claro soy un jugador casual, lo que significa que ni tengo volante ni tengo intención de tenerlo a corto plazo. Básicamente no soy simracer ni quiero serlo, simplemente soy un fulano que quiere conectar el mando al PC para echarse unas carreras de chill con cierto nivel de realismo y dificultad. Si quieres saber sobre qué tal está el manejo con volante y el realismo parece que, según ciertas cosas que he leído, ha pegado un buen salto en ese apartado, no llegando a niveles de simuladores pero teniendo la calidad que necesita un videojuego con licencia oficial de la F1. Para los fulanos sin dinero para comprarse un volante como yo te puedo decir que la experiencia con mando es divertida de narices, eso sí, te va a tocar hacer pequeños ajustes y desactivar distintas cosas para que la conducción se sienta como un cierto reto pero que tampoco sea un dolor insufrible. Temas de dificultad pues lo mismo que al menos teníamos hace años, ajustable a mas no poder, y el rendimiento pues en mi PC iba a una buena cantidad estable de FPS sin tener que sacrificar elementos gráficos tochos aunque tampoco es que este sea su punto fuerte. Como detalle a añadir tenemos este año a Antonio Lobato y Pedro de la Rosa comentando tanto las aperturas como los cierres de las carreras y actuando como narradores también el las distintas carreras de Braking Point. Un Lobato sensacional, al igual que en la vida real, con sus típicas intros que tanto molan y sintiéndose como pez en el agua en esto de los videojuegos junto a un Pedro que para nada se le da bien esto de narrar juegos y que se le ha notado muchísimo menos cómodo que en las retransmisiones de DAZN, pareciendo sus líneas más una simple lectura de guion que otra cosa.

Hablemos ahora de los distintos modos de juego que tiene este F1 23, un punto que va de la mano básicamente con el del gameplay, porque un juego con buen gameplay pero sin modos a los que jugar y viceversa no tiene ningún recorrido. Tenemos lo típico, el modo historia, el modo carrera, el modo temporadas, la conducción de chill y el multijugador. El primero está comentado así que vamos al segundo. Al igual que años anteriores contamos con un modo carrera en el que puedes elegir ser un rookie en uno de los equipos de la parrilla o crear y gestionar tu propia escudería desde cero. Diría que el modo piloto es el mejor si lo que quieres es correr y ya, pero el modo equipo tiene el picante extra de gestionar un equipo sin tampoco mucha dificultad añadida. Algo bueno y algo malo, porque si quieres tener un equipo creado para llevarlo desde abajo a la gloria sin partirte los cuernos pues estas de enhorabuena, pero si quieres algo más de profundidad en temas de gestión e ingeniería pues lo llevas claro. A ese punto negativo se le puede sumar el de no poder modificar la estructura del campeonato más allá de la cantidad de carreras (y no mucho porque solo te dan tres opciones), obligándote a correr tres veces en USA sin darte la posibilidad de sustituir alguna de estas pistas por Portimão o Shanghái. Aun con eso es el modo perfecto por si lo que quieres es correr campeonatos constantemente con un puntito extra, además de que también tienes la posibilidad de tener un modo carrera con un colega y llevar ambos a Haas a la cima de la automoción, esto último vía online.

A esto hay que sumarle el F1 World, el modo donde se agruparán tanto los modos online como los offline más sencillitos. Es el modo donde podrás realizar carreras individuales, temporadas de F1 o una contrarreloj simple con un coche de la F1, de la F2 o el tuyo propio. Además de esto y de contar con cierta malgama de supercoches, los modos multijugador se reúnen en este apartado, habiendo distintas modalidades que van desde lo más casual hacia el competitivo, todo esto teniendo como elemento principal tu propio coche. Este coche es tuyo al 100%, pudiendo modificar tanto el apartado estético como añadiéndole mejoras que se desbloquearán según vayas jugando más al juego y según avances en el pase de temporada. Este "season pass" El principal elemento negativo junto a los “Pit Coins”, la moneda del juego, una cosa donde no voy a entrar porque ya sabéis todo lo negativo que tienen los battle pass y las microtransacciones absurdamente caras. Aun con todo esto, este “F1 World” es una buena novedad que une bajo un mismo techo tanto el singleplayer más casual como el multijugador al completo.



F1 23 no es la gran nueva maravilla dentro del mundo de los videojuegos de automoción, un género que de manera sensacional cuenta con buena variedad de títulos a diferencia de otros deportes como el futbol o el baloncesto (en los juegos de tenis paso de meterme porque es de traca). Si eres un jugador que lleva pagando F1 los últimos años pues no puedo darte una opinión sincera sobre si el salto de F1 22 a F1 23 merece la pena ya que no he jugado a las tres versiones anteriores. Eso sí, como fan de la F1 que llevaba fuera de esta rueda denominada "juegos de F1" puedo decir que es un muy buen punto de reentrada a la saga. Es simple, entretenido y lo puedes amortizar bastante bien jugando un par de temporadas al modo carrera o echándote unas risas con los colegas. No es una maravilla pero Codemasters ha hecho un buen trabajo con esta entrega.

Artículo Anterior Artículo Siguiente