Review AEW All Out 2023: las veladas de wrestling en Chicago siempre son sublimes

All In, el show más grande de AEW y básicamente del wrestling mundial. No sé cuántas veces he repetido esto en las últimas semanas pero este evento en Wembley superó las expectativas e igualó la idea de grandeza que muchos teníamos en la cabeza. Estábamos ya satisfechos para rato con esto del wrestling, pero justo después de acabar recordamos una cosa, All Out estaba a la vuelta de la esquina. Nos habíamos olvidado casi todos de que el evento anual más capital de AEW (o al menos así lo considero yo) tenía fecha y lugar: el 3 de septiembre en el United Center. Con una cartelera interesante construida de aquella manera y con el nubarrón del despido por problemas en backstage del héroe local, los fans de AEW se preguntaban un par de cosas: ¿Volverá AEW a dar un gran show en Chicago? ¿Podrá seguir la estela de All In? Veamos a ver que tal.


Antes de empezar con el evento en cuestión, como es costumbre comentemos los resultados del preshow. Los resultados son los siguientes:

  • "Hangman" Adam Page ganó el Over The Budget Charity Battle Royal
  • Hikaru Shida, Willow Nightingale y Skye Blue derrotaron a Athena, Diamante y Mercedes Martinez
  • The Acclaimed derrotaron a Jeff Jarret, Jay Lethal y Satnam Singh para retener el campeonato de tríos de AEW

ROH TAG TEAM CHAMPIONSHIP: BETTER THAN YOU BAY BAY © VS DARK ORDER

Después de ser el evento principal del show más grande de AEW y de toda la historia del wrestling, los brochachos afianzaban su amistad y buscaban defender sus recién obtenidos títulos por parejas de AEW. Adam Cole y MJF querían combate para All Out, y que mejor forma de tenerlo que defendiendo sus títulos y demostrando su amistad ante John Silver y Alex Reynolds, quien ganaron esta oportunidad en el episodio de Rampage de esta misma semana. Una primera defensa bastante buena, no fue un combate brillante pero supo llevar ese furor de la afición por los campeones al propio encuentro. En eso consistió este 2v2, en materializar la euforia de los fans de Chicago. Con Dark Order como villanos (se me hace raro), Better Than You Bay Bay supo jugar increíblemente bien sus cartas. Al principio cada gestito de MJF era celebrado brutalmente, a la mitad del combate teniendo Cole que batallar solo debido a problemas en el cuello de Max, y al final con ese regreso a la acción del campeón mundial de AEW. Los fans gritaron como locos con esa Kangaroo Kick y celebraron aún más efusivamente la victoria vía Double Clothesline. Nunca pensé que esto iba a pasar, pero este equipo improvisado es lo mejor de AEW actualmente y MJF como el bueno de la película funciona sensacional.


ROH TELEVISION CHAMPIONSHIP: SAMOA JOE © VS SHANE TAYLOR

Combate construido un poco de improvisto, deprisa y corriendo vamos, como unos cuantos de este show ya que construir un PPV una semana después de otro es difícil, más aún cuando el anterior era del calibre que era. Poco más de 6 minutos de dos bichos tamaño nevera dándose de palos demasiado fuerte. Podría haber durado un poco más la verdad, pero como dijo el propio Kevin Kelly durante la retransmisión, “los combates entre dos pesos pesados no duran quince rondas”. Al final, victoria de Samoa Joe vía tapout gracias a su Coquina Clutch. Aunque, en verdad, el picante se dio justo antes del encuentro. Saliendo MJF justo cuando entraba Joe, la mecha se encendió después de que el campeón televisivo empujase al campeón mundial con una sonrisilla picaresca, desatando esto un fregado monumental y, por qué no, iniciando una posible rivalidad. 


TNT CHAMPIONSHIP: LUCHASAURUS © VS DARBY ALLIN

El pasado julio, Darby Allin ganaba una batalla real en Rampage para ganar una oportunidad por el campeonato de TNT que poseía Luchasaurus en ese momento. En medio de una rivalidad contra Swerve Strickland, el autoproclamado “campeón” Christian Cage quiso jugar sus cartas de la mejor forma posible para evitar que Luchasaurus perdiera la correa en All In. Entrando como repuesto de AR Fox para All In, la jugada no le salió tan correcta, perdiendo ese combate de ataúdes pero consiguiendo que Darby no llegase a Chicago al 100%. Esas lanzadas suicidas contra el ataúd del combate le costaron caras al aspirante. Un falso campeón intentando que su discípulo (el auténtico campeón por cierto) retuviera el título que considera suyo frente a un aspirante que buscaba convertirse en campeón de este campeonato por tercera vez.

Darby, sabiendo a lo que se enfrentaba, quiso empezar rápido y se abalanzó velozmente contra su oponente, un encuentro lento jugaba en su contra vista la diferencia de fuerza y tamaño. El plan no salió como esperaba y acabó con Luchasaurus castigando fuertemente su espalda dañada, todo esto con el beneplácito de un Christian Cage que quería ver la destrucción de Darby. Con sangre y una espalda destrozada, Darby intentaba sobrevivir, y aunque diera ramalazos de estar por delante de su rival, al final el gigante se sobreponía. Tal era el nivel que incluso Cage quiso jugar mentalmente con el jovencísimo Nick Wayne incitándole a que arrojase la toalla y así su mentor se librase de tal castigo, movimiento de veterano buscando aprovecharse de la juventud del oponente. Eso no funcionó, acabando además con Cage sufriendo un ataque en plancha por parte de Darby. Parecía que tenía el control y la victoria asegurada, pero un movimiento rastrero de Cage que buscaba distraer a Darby le causó la derrota. La amenaza de que Wayne sufriera un “Con-chair-to” supuso la suficiente distracción para que Luchasaurus aplicase un brutal Tombstone Piledriver seguido de otro brutal Lariat para retener su correa.


POWERHOUSE HOBBS VS MIRO

¿Cómo puedes construir un combate entre dos de las malas bestias más grandes de todo AEW? Exacto, con la literatura de por medio. Suena estúpido, y dicho así lo es, pero es la verdad, más o menos. Powerhouse Hobbs quería seguir añadiendo capítulos a su “Book of Hobbs”, uno de ellos siendo dedicado a su redención, y quien mejor para ello que el redentor. Fijando a Miro como su objetivo y atacándolo, el antiguo subordinado de su dios y ahora ser que busca reemplazarlo, aceptó el duelo por el más puro motivo de “tú me pegas pues ahora te pego yo por venganza”. Teníamos combate para All Out.

Si ese Samoa Joe contra Shane Taylor lo definíamos como un choque entre dos frigoríficos, este es un choque entre dos armarios grandes del IKEA, aunque en verdad no arrancó todo como deseábamos. Un comienzo lento y tedioso que no convencía y que hizo que los fans de Chicago tomasen la delantera con un sencillo cantico: “MEAT!”. Gritaron a ambos wrestlers “WE WANT MEAT!” y ambos respondieron transformando un soporífero combate en un reparto de ostias gargantuescas como si de un choque de tranvías se tratase. Golpes y golpes y más golpes al grito de “MEAT!” cada vez que impactaban y que culminó con la victoria de Miro por rendición vía Game Over. No fue un “MEAT FOREVER!” como cantaron los aficionados pero estuvo absurdamente entretenido durante ese cacho. Un cacho que luego tuvo un segmento post combate raro donde Hobbs atacaba a Miro y CJ Perry, la mujer del búlgaro, para salvarle. Lo raro no era eso, es que Miro renegó de su mujer, incluso diciendo que no era real. Aun así, buen combate, uno que empezó mal y que viró a mucho mejor gracias al gusto cárnico de unas 10.000 personas. Como diría el United Center, “HOLY MEAT!”.


TBS CHAMPIONSHIP: KRIS STATLANDER © VS RUBY SOHO

“Quiero luchar por tu título”, “vale”. Así se tendría firmada una lucha titular sin hacer muchos malabares, que es lo que ocurrió en este caso. Ruby Soho retaba a Kris Statlander por el campeonato de TBS en lo que fue un encuentro bastante entretenido entre dos wrestlers que tienen una alta química en el ring. Acción variada, varios movimientos bastante chulos y un poquito de storytelling. La acción de poco más de 12 minutos se resolvía con Kris reteniendo la correa gracias a una distracción extraña de Toni Storm y un Sunday Nigh Fever para la cuenta de tres. Distracción extraña porque si Saraya, su compañera de The Outcasts la estuvo ayudando, Toni, su otra compañera, decidió arruinarle la victoria quitándole un spray que iba a usar Soho a su favor. Mas extraña aun cuando te fijas que esto es fruto del nuevo personaje de Storm, uno que está cayendo en una locura cada vez mayor debido a sus derrotas por el campeonato femenino. Quizás esa fijación por el spray fue por lo que ocurrió en All In. Bueno, resumiendo, encuentro entretenido. Eso y que chulísimo atuendo de Statlander inspirado en Zoolander, hasta el propio Ben Stiller lo admitió.


BRYAN DANIELSON VS RICKY STARKS

Ricky Stark cayó por un agujero profundo que ha desembocado en la personificación de la desesperación, traicionando sus principios y volviendo a esas raíces narcisistas y llenas de ego. Esa desesperación le llevó a realizar lo impensable, a atacar a la leyenda Ricky “The Dragon” Steamboat con su propio cinturón después de perder contra CM Punk (otro que no sabe contener su violencia e ira fíjate tu). Tras una suspensión y el perderse All In, Starks quería cerrar esto de la mejor manera posible para él, enfrentándose a The Dragon en un “Strap Match”. Ambos Ricky accedieron, firmando un contrato en el que se leía “Ricky Starks vs. The Dragon”. El problema es que Starks no se enfrentaría a Steamboat, sino a otro dragón, al americano más concretamente. Tras una lesión dura y con muchas dudas sobre su recuperación, Bryan Danielson regresaba a la acción para ser el rival de Ricky Starks en este combate que estipula que ambos luchadores serán unidos por una larga correa de cuero. La violencia estaba servida.

Con Ricky Steamboat en comentarios y entrando Bryan otra vez con “The Final Countdown”, empezaba esta más que pintona e interesante encerrona a Ricky Starks. Como buen heel que es, decidió olvidarse de atar su mano a la correa y fue directo a por su rival, haciéndole sangrar nada más empezar con la ayuda de la hebilla del cinturón que el mismo trajo al ring. Con Danielson sangrando en el ringside, Starks aceptó ser atado, empezaba este “strap match”. Tomando la ventaja y usando la correa a su favor, Ricky pretendía ganar dominando, pero The Dragon es mucho wrestler y encontró la forma de tomar la delantera. Con el poste y usando la correa como arma, Danielson hizo sangrar a Starks además de generarle una cantidad de cardenales absurda en su espalda. Ambos se olvidaron del wrestling y optaron por zurrarse con la correa en todo el cuerpo, incluso en la misma cara, por ver quien aguantaba. Starks parecía que se había adaptado a ese camino de la violencia, pero Danielson comía cuero como campeón, los golpes no funcionaban y estaba cerca de la derrota. Una fase final del encuentro abierta por la pequeña intervención de Big Bill y Steamboat y que concluyó con uno de los finales más brutales y violentos que recuerdo. Tras unos pisotones brutales, The American Dragon decidió aplicar su LeBell Lock asfixiando a un Starks ensangrentado con la propia correa, cayendo al final no por rendición sino por perder la consciencia solo por no querer rendirse.

Un encuentro por el que tenía mucho miedo, tan solo habían pasado ocho semanas desde esa fractura y no sabía si Bryan estaba al 100%. Y por estar, pues no lo estaba, luchando un duelo sin hacer cosas vistosas, con una protección solida en su antebrazo y llevando Ricky Starks la totalidad del combate. Aun con eso, con un Bryan Danielson con solo un brazo funcional, dieron uno de los mejores encuentros de la noche sino el mejor, pero es que hay otros dos que son también absurdamente buenos. Ricky Starks es un fuera de serie, Bryan Danielson es el mejor de la historia, y ambos nos han dado un combate increíblemente sangriento y violento que recordaremos como uno de los mejores de esta estipulación.


EDDIE KINGSTON & KATSUYORI SHIBATA VS BLACKPOOL COMBAT CLUB

Repasemos la lista: Eddie y Claudio se odian a muerte, Shibata solo quiere repartir guantazos y Yuta es un pequeño trozo de mierda. ¿Conclusión? Buenos ingredientes para este coctel, uno denominado “darse de ostias hasta que uno caiga”. Básicamente, y salvando el típico momento donde los malos golpean fuerte a uno de los buenos para que el otro entre haciendo el salve, ocurrió eso, intercambio constante de chops, slaps, uppercuts y demás entre los que estuvieran en el ring. Esto llevó a spots bastante chulos generalmente capitalizados por Katsuyori Shibata y Claudio Castagnoli. Si no era un intercambio de uppercuts bastante chulo era otro tipo de golpe, más moló aun ese spot en el que ambos se zurraban mientras The Wrestler tenía atrapado a Wheeler Yuta en un Muta Lock. Mas gracioso fue cuando Shibata atrapó a Claudio en un Anke Lock haciendo un 2x1 o cuando el suizo noqueó al japonés causando mucho más daño en Yuta pues porque seguía atrapado en el Muta Lock. Un combate que cerró de manera sorpresiva tanto para los fans como para el propio Eddie cuando el BCC se llevó la victoria vía tremendo European Uppercut de Claudio Castagnoli, librándose inútilmente Eddie a la cuenta de 3’1. El odio entre ambos parece que sigue vivo.


KENNY OMEGA VS KONOSUKE TAKESHITA

El cierre de una ardua y larga rivalidad ya tiene una buena fecha de cierre. Desde esa traición ejecutada por el verdadero eje del mal, Don Callis, nuestro querido Kenny Omega no ha hecho más que estar a la sombra de un plan malvado por hundirle de manera definitiva. Un plan en el que encontró un compañero, un discípulo o, como él le dice, un hijo que haría que The Cleaner fuera algo de un pasado que poco a poco sería más lejano. Ese Kenny supercampeón capaz de arrasar en el Tokyo Dome ya no existía, este nuevo Kenny más mayor y simplemente más calmado y feliz con su carrera no era del agrado de Don Callis, o así él lo ve. Firmado para All Out, este enfrentamiento podría definir de una vez por todas si Don tenía razón, si Kenny es cosa del pasado y si el futuro es para Konosuke Takeshita.

Este encuentro, de manera resumida, fue un video de highlights de algo más de 20 minutos, decidieron sacar a la palestra lo mejor de cada uno y se dedicaron a hacer acción surrealista tras acción surrealista sin mucha estructura aparente. ¿Y sabéis qué? Que me encanta. Un comienzo lento, se va a la mierda rápido cuando Takeshita a poco de empezar casi fractura el cuello de Omega con un Saito Suplex, acciones locas por doquier y un final con cierto peso argumental. Para mí es la decisión correcta, Kenny Omega es un genio y se le da de maravillas tanto el selling como el llevar un encuentro a base de pura acción, mientras que Takeshita es un sobrehumano. Básicamente el encuentro se creó y se llevó de esta manera para hacer lucir al japones de una manera absurdamente buena, y madre que si lo consiguieron. El chaval es un cyborg, con su 1’87m de altura y sus 105kg es un wrestler absurdamente rápido, absurdamente ágil, absurdamente fuerte y absurdamente inteligente, el pack completo vamos. Demostró todo eso con muchísimas acciones, si no era golpeando a Kenny de tal manera que sonaba hasta en Albacete era o moviéndose a un ritmo vertiginoso o realizando acciones absurdas, ese Blue Thunder Bomb desde la tercera cuerda fue brutal. Al final, los objetivos fueron cumplidos. El primero de ellos era el de Don Callis y el de Konosuke Takeshita, que tras múltiples rodillazos sumamente brutales a los que llama Zahi, consiguió conectar uno final con la rodilla al descubierto para ganar el encuentro. El segundo era simple, hacer lucir al japonés como una estrella, y vamos que si lo consiguieron.

Combate buenísimo de principio a fin, es lo que tiene cualquier encuentro en el que Kenny Omega está a tope. Un combate que consiguió ese efecto de hacer lucir a Konosuke Takeshita como un talento top. El físico lo tiene, la habilidad la tiene, el aura de gran wrestler también la posee y esas carencias que pueda sufrir tanto de personaje como al micrófono han sido suplidas a la perfección gracias a esa alianza con Don Callis. La alianza tiene todo el sentido del mundo, Takeshita quiere ser el mejor y Don simplemente quería reemplazar a Omega y destruirle tanto física como mentalmente, y quien mejor para ello que Konosuke, el bautizado como “la versión mejorada de The Cleaner” por unos cuantos. AEW ha gestionado hasta ahora esta situación perfectamente y ahora tiene en sus manos a alguien que puede ser perfectamente campeón mundial antes de acabar el año. Veremos cual es el siguiente paso para ambos wrestlers.


FTR & YOUNG BUCKS VS BULLET CLUB GOLD

Y por enésima vez en este evento debido al calendario de eventos de AEW que Tony Khan parece negarse a cambiar, tenemos otro encuentro construido en tan solo una semana. The Young Bucks y FTR tuvieron su tercer encuentro dentro de su saga en All In, uno donde vencieron los campeones y los hermanos mordieron el polvo. Al negarse los perdedores a darle la mano a los vencedores, estos segundos fueron a buscar a los primeros a su vestuario. La respuesta fue un “no podíamos hacerlo porque estábamos decepcionados tanto con el resultado como con nosotros mismos”, pero una alianza atípica se formó debido al reto de la “Bang Bang Gang”. Bullet Club Gold, con la euforia de la victoria en Wembley, retaron a estos dos equipos a un encuentro en All Out y bueno, aquí estamos.

Combate prototípico por equipos de AEW con un girito en su planteamiento, pero es que el combate prototípico por equipos de AEW es divertido de narices. Un 4v4 que pareció en buena parte de este un cuatro contra “dos-y-dos”. Los Young Bucks y FTR parece que no querían trabajar juntos en equipo, una falta de entendimiento que en un principio los miembros de la Bang Bang Gang aprovecharon y que más tarde desapareció. Ambos equipos, los hermanos Jackson con una reacción muy dividida por parte de la fanaticada de Chicago, empezaron a trabajar como equipo de manera un poco improvisada, haciendo secuencias dobles-triples e incluso realizando los movimientos finales de cada dupla con un miembro de cada. Ese dinamismo natural de estos encuentros y ese poquito de mordiente dieron un combate entretenido de narices que culminó con el robo típico que a Jay White le gusta hacer, Bladerunner sobre Cash gracias a una distracción de Juice para que evitase un Shatter Machine como para que Colten Gunn le cubriera y ganara el combate para su equipo. Buen encuentro a modo de antesala para el main event y, además, otra prueba de que Jay White es uno de los mejores talentos dentro de AEW. Esa marcha de CM Punk va a darle ese spot principal en Collision y quien sabe, quizás ese torneo en Dynamite Grand Slam por una oportunidad por el campeonato mundial sea su ticket hacia la cima.


AEW INTERNATIONAL CHAMPIONSHIP: ORANGE CASSIDY © VS JON MOXLEY

“Esta será la definitiva, ahora seguro” decíamos todos cada vez que Orange Cassidy defendía su campeonato internacional de AEW, y en todas esas ocasiones retenía. Se iban encadenando las defensas exitosas una detrás de otra y nadie parecía arrebatarle la corona. Si no era porque Orange era mejor luchador, era por ser el más listo, por tener una pizquita de suerte, por resiliencia o por puro instinto de supervivencia. Venciendo a todo el mundo en todos los shows imaginables, Orange Cassidy llegaba a esta edición de All Out con 31 defensas exitosas y 326 días como campeón. Pero todo el mundo tiene siempre una gran piedra en el camino, y el gran escollo en este reinado de leyenda era el “ace” de AEW: Jon Moxley. Tras unos meses donde OC ha colisionado contra el Blackpool Combat Club en distintos encuentros y por distintos motivos, ambos luchadores decidieron cruzar sus caminos: Orange Cassidy para consolidarse como el luchador fundamental de la compañía y Jon Moxley para ver si el campeón era campeón por pura suerte o por pura habilidad. Un main event que pintaba genial.

El resumen de este encuentro se puede hacer en dos palabras, siendo este también el resumen del reinado de Orange Cassidy: sentimiento y supervivencia. Moxley desde el primer momento fue fiel a sus palabras y a sus convicciones, quería ver si el campeón decepcionaba en la que era su prueba definitiva, así que arrancó con todo lo que tenía. Si Orange intentaba sobreponerse, Moxley le volvía a derribar, no solo era una prueba contra su resiliencia física, era una prueba contra ese efecto de supervivencia que siempre sacaba a relucir el campeón. Con muchísima sangre no solo en el rostro sino en su ropa y en el ring, Orange siempre encontraba la forma de resistir, ya fuera escapando los ataques de su rival o recibiéndolos y sobreponiéndose a ellos. Mox estaba harto, estaba intentando de todo, así que decidió acabar por todas con esto, estampar a su rival con un Piledriver en el suelo descubierto del ringside. El problema es que, otra vez, ese factor supervivencia del “freshly squeezed” volvía a la palestra y acabó estampando a Mox contra ese mismo suelo con un Beach Break. Volvía la historia al ring y apuntito estuvo de ganar, pero Mox golpeaba fuerte otra vez. Golpeaba con un Lariat brutal, pero Cassidy se levantaba milagrosamente. Volvía a golpear con otro Lariat pero Orange se libraba de la cuenta de tres. Moxley iba a por el Paradigm Shift, lo conectaba y como si de un milagro se tratase, el campeón se libraba con su último aliento. Mox no daba crédito, nadie daba crédito, Orange Cassidy seguía vivo, ese espíritu de guerra y supervivencia decía “antes muerto que perder”. Pero hasta el mismo sabía que ya había gastado sus últimas energías, y con una peineta hacia Mox se despedía Cassidy, quien recibiría otro Paradigm Shift para cerrar una derrota que había peleado hasta el final para evitar.

Se cierra posiblemente uno de los mejores capítulos ya no solo de AEW sino del wrestling estadounidense. Un reinado de 326 días, un reinado con 31 defensas exitosas, un reinado que ha elevado un campeonato que parecía más circunstancial o de relleno que otra cosa a cuotas dignas de ser considerado el segundo campeonato más importante de la compañía. Un reinado que ha establecido al veterano Orange Cassidy como uno de los mejores y más importante luchadores, no solo de AEW, sino del wrestling internacional. De ser considerado un burdo luchador de comedia a ser visto como uno de los talentos más vitales de All Elite Wrestling. Un reinado legendario, posiblemente el mejor en la historia de AEW por encima de cualquier otro. Muchísimas gracias Orange, eres increíble.


Esta edición de 2023 de All Out es un show que cuando fue anunciado sembró muchas dudas por las fechas y que cuando empezó a anunciar combates seguía sin convencer mucho, pero que después dejó unas sensaciones de ser un PPV que si de futbol se tratase pues ha metido un golazo por la escuadra. All Out ha sido, sin ninguna duda, el show del año para AEW. Dando la sensación de ser las sobras de All In, este PPV ha dado un show espectacular con una cartelera atípica y en un recinto mucho más pequeño pero con un público de Chicago excelso y posiblemente el mejor trabajo de producción en lo que llevamos de año. Hemos tenido de todo, desde dos mostrencos dándose de palos hasta un evento principal sangriento y sentimental pasando por un “strap match” increíble y por una especie de pase de antorcha. Los combates más flojos han sido decentes y han cumplido su labor de completar el show, mientras que los enfrentamientos más resonados no solo han cumplido sino que incluso han podido ganarse un hueco en la lista de combates del año. Especial y merecida mención para Orange Cassidy, llenando la ausencia de un combate por el campeonato mundial con un main event de 10 donde su legendario reinado como campeón internacional llego a su fin. Se merecía ese puesto en la cartelera y, sobre todo, las ovaciones posteriores. En resumen, otra vez AEW hace magia en Chicago, esta ciudad y estos fans siempre hacen que veamos lucha libre de calidad como si de magia se tratase, por algo es considerada la ciudad del wreslting.


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