Review temporada de invierno 2024

“Año nuevo, temporada nueva” como reza el dicho otaku que me acabo de inventar. Si el calendario marca enero significa que arranca la primera temporada del año, arranca la temporada de invierno, esta vez la de 2024. Una temporada que se basa en que hay una cantidad de cosas bárbara para ver. No está al nivel de otras donde tienes como más de diez animes que son de visualización obligatoria o porque son continuaciones de series consagradas o porque son estrenos megaesperados pero hay cositas. Y como ya habré dicho veintemil veces, no me da la vida para ver todo. Ya no es que el TFG me quite horas de vida porque por fin acabé la carrera, esta vez es la vida de adulto la que me dice “quieto parado”, bueno eso y que tengo más hobbies que cultivar y cuidar. Aun en ese pretexto he conseguido sacar tiempo para ver cuatro cosas de esta temporada, así que veamos cuales han sido y que me han parecido todas y cada una de ellas.


TRAGONES Y MAZMORAS

Tras escapar a duras penas de la muerta, Laios y parte de su grupo de expedición consiguen dejar atrás al temible dragón que casi acaba con su vida. La mala noticia es que dicho escape se dio gracias al sacrificio de Falin, su hermana, quien sacó vía hechizo al resto de miembros. Con tan solo Marcille y Chilchuck como compañeros y más pobres que una rata, Laios decide volver a la mazmorra para rescatar a su hermana del estómago del dragón antes de que sea digerida por completo. Pero, sin dinero, ¿cómo van a poder sobrevivir dentro de la mazmorra durante tantos pisos? Fácil, comiéndose a los bichos que maten. Asqueroso sí, pero gracias a Senshi, su nuevo compañero, descubrirán que esas cosas tan aparentemente asquerosas pueden saber delicioso siempre que se sepa como guisarlas. Así que acompaña a estos cuatro chalados en la aventura gastronómica más absurda que has visto con ciertos giritos que seguramente no te esperas.

Tragones y Mazmorras es una autentica maravilla, no solo por el increíble título adaptado a nuestro castellano, sino porque el anime en si es una maravilla. La cosa es tal que así: te sientas en tu sitio de confianza para ver anime, enchufas Netflix y te das cuenta de que tienen esta cosita en su catálogo, echas un ojo y ves que es el anime de fantasía con mazmorras y demás, empiezas a verlo y de repente tu cara cambia por completo porque en vez de ver lo que esperabas (que en realidad viendo el título que narices te esperabas la verdad) estas visualizando como un enano barbudo cocina monstruos de manera suculenta. ¿Y lo peor de todo? ¡Que te encanta! Pasarás rapidito de estar deseando a que Laios salve a su hermana a decir constantemente “Marcille cierra la p*ta boca, Senshi ha hecho cocretas de jamón”. Es el anime de cocina más extraño y a la vez más maravilloso que tu paladar de otaku pueda degustar. Pero claro, esta es la parte de Senshi haciendo parrillada con carne de monstruos cual rioplatense en un día de verano, queda lo del dragón y alcanzar el fondo de la mazmorra. Porque si entraste por un motivo y te quedaste por otro estate atento porque el pedazo golpe que te pega es de época. Como si de Stan Hansen atizándote con su famoso Lariat se tratase, Tragones y Mazmorras cambia de tercio tan genialmente que madre mía. Pasamos de estar de risas porque “jijijaja Senshi ha cocinado bichos moneda” a “su p*ta madre esto de hacer un puzle arqueológico para revivir a alguien no es divertido”. Y aun con ese girito y ese cambio de tono, este anime sigue molando una barbaridad. Llegaste por la elfa y las mazmorras, te quedaste por los rebozados de Senshi y seguirás por lo que viene después (bueno y también seguirás porque mola ver a Senshi hacer rebozados y demás). Buen anime en todos sus apartados porque visualmente también es una delicia nunca mejor dicho, mejores recetas culinarias.


METALLIC ROUGE

Es el futuro, la sociedad humana se ha expandido más allá del planeta Tierra y ha conseguido asentarse en otros cuerpos del sistema solar. En una sociedad aparentemente3 de tipo 1 y cercano al tipo 2 en la escala de Kardashov, los humanos conviven con los “neans”, un tipo de androide muy avanzado que ayuda en las labores más rudimentarias de la sociedad. Debido a su origen y a que tienen que respetar el famoso código Ashimov, estos androides son ciudadanos de segunda. En este contexto, nuestras protagonistas, la protonean Rouge Redstar y la humana Naomi Orthmann, buscan y dan caza a otros protoneans llamados “Los Nueve Inmortales”. Pero según avanza la trama y conocen a más y más seres de esta sociedad, seres hostiles como pacíficos y otros con intenciones ocultas, Rouge se planteará las bases de esta sociedad, la existencia de los neans e incluso su propio motivo en este mundo. Vamos, una historia de misterio futurista con mil y un toques de los mayores clásicos del género de ciencia ficción.

Con este anime ocurre algo parecido a cuando intentas cocinar un plato nuevo pero lo máximo que has tocado de utensilios en tu vida sea el microondas y una sartén para hacer huevos fritos con patatas. Metallic Rouge tiene todos los ingredientes para hacer una buena serie animada: tiene un estudio con prestigio detrás, un buen elenco de trabajadores, un aspecto visual cautivador, una ambientación muy interesante, una dupla protagonista llamativa y elementos narrativos curiosos. ¿El problema? Es que la ejecución es mala, muy mala. Juntar cositas del género sci-fi inspiradas notablemente en Desafío Total, Blade Runner y demás obras del medio con elementos típicos del anime no puede fallar pero lo hace por un detallito concreto: la historia es bastante mala. Metallic Rouge coge mil y un conceptos y hace un mejunje extraño que durante sus trece episodios se siente inconexo, incoherente y poco llamativo. Ese argumento previamente contado se desarrolla de una manera tan accidental que durante muchos episodios de la trama te preguntas constantemente una colección de “por ques” y “quienes” muy amplio. “¿Por qué tienen que ir a este sitio?¿Por qué tienen que parar a estos malos? ¿Por qué ocurren estas cosas? ¿Quiénes son estas personas? ¿Por qué son los malos?” y así durante los múltiples episodios de veintialgo minutos que hay. Al final, toda esa trama revuelta de dudas se va concretando pero de una forma tan anticlimática que deja frio hasta a un pingüino o a un burgalés. Ese lio que ha hecho que la trama y sus personajes se sientan intrascendentes de manera continua, una intranscendencia seguida por una sucesión de “plot twists” o predecibles o increíblemente estúpidos en la recta final (lo de la identidad de Naomi o la del marionetista me parece de traca). En resumen, Bones nos dio por su veinticinco cumpleaños un anime que en la teoría tenía todo para funcionar muy bien pero acabó fallando estrepitosamente gracias a su trama, una que parecía irse escribiendo de manera semanal un poquito al tuntún, de manera improvisada. 


MASHLE (T2)

Vuelven Mash y compañía a nuestras pantallas con esta segunda temporada, una en la que retomamos donde terminó la anterior y donde veremos como consigue solucionar nuestro protagonista el gran infortunio sufrido. Mash deberá enfrentarse al juicio de los Visionarios Divinos, los cuales han descubierto su secreto y ha puesto en seria duda sus aspiraciones para vivir una vida tranquila con su padre adoptivo. Pero viendo estos apoyos, el regreso de Innocent Zero y demás, a Mash Burndead se le da una condición para su supervivencia: aprobar el examen para convertirse en visionario. ¿Lo conseguirá viendo quien tiene en frente, quien tiene en contra y con Innocent Zero acechando?

Mi opinión de esta segunda temporada va a ser muy parecida, por no decir casi idéntica, a la de la primera: es un despiporre constante. No es un calco a esa primera temporada ya que la variable “historia” de esta ecuación tiene algo más de peso ahora debido a que la trama avanza hacia esos puntos que se establecieron en esa primera iteración. Ocurren cosas y, por ende, avanza la trama: descubren el secreto de Mash, exámenes de visionario divino, la intervención de Innocent Zero y más cosas. Aun con ese mayor peso de la trama siguen recurriendo a esos gags a los que nos acostumbramos cuando vimos los primeros doce episodios de Mashle. Sigue habiendo ese humor, esa tontuna general y también ese ya conocido trabajo sensacional en el doblaje. En resumen, Mashle sigue siendo una visualización obligatoria si te gusta la comedia en el anime, una segunda temporada donde la balanza se inclina un poco más hacia la historia pero la aportación de la comedia al cómputo general sigue siendo lo que le da ese puntito al anime que tanto nos gusta.


SOLO LEVELING

Hace años aparecieron portales mágicos repartidos por todo el planeta, portales conectados a otros mundos y plagados por monstruos y bestias inmunes a la armería más tradicional y moderna. Con los portales también llegaron poderes mágicos, poderes que pueden despertar en los humanos y que pueden variar de una persona a otra. Estableciendo niveles tanto para los poderes como para estas mazmorras nacieron los gremios, entidades que, vía contrato como si de PMCs se tratasen, se encargaban de limpiar estas zonas para cerrar los portales y, de paso, obtener recursos valiosísimos. En esta tesitura se encuentra Jin-Woo Sung, cazador de rango E apodado como “el cazador más débil de toda la humanidad”. Estando en el rango más bajo y siendo un lastre para el resto de sus compañeros, Jin-Woo presencia un desastre brutal en una rarísima mazmorra doble donde, al borde de la muerte, sufre un segundo despertar. Con esta tesitura y sin subir de rango debido a este golpe de suerte nuestro prota se encuentra con que ahora forma parte de un “sistema”. Como si de un videojuego se tratase, Jin-Woo sube sus habilidades cumpliendo misiones diarias, entrando en mazmorras y venciendo enemigos tanto de otros mundos como humanos. Con esta tesitura, ¿se convertirá Jin-Woo en el cazador más legendario de la humanidad?

Tengo que empezar dejando una cosita bastante clara: los dos primeros episodios entran de cabeza en el monte Olimpo de mejores comienzos en un anime. Esos 45 minutos sirven perfectamente para hacerte caer en la trampa semanal (o la del ritmo que te marques para ver los otros diez capítulos) y para marcar tanto el tono como para establecer el listón en varios aspectos. Dos episodios brutales y que sin duda son los mejores de esta primera temporada, siguiendo el ritmo en los otros diez en temas como animación y banda sonora. A-1 Pictures hace un trabajazo en el apartado visual, no solo trasladando los diseños y el montante de color del manhwa original sino también en la animación per se, haciendo que una parte tan importante de un anime de peleítas como son dichas peleas se vean genial. En la parte que entra por los oídos nos topamos con el que es uno de los mejores doblajes castellanos, sino el mejor, realizado por Crunchyroll, y si a esto le sumas que el siempre sensacional Hiroyuki Sawano vuelve a hacer magia con la banda sonora pues queda también un gran trabajo en este otro apartado. Dos de las tres patas que sujetan esta obra cumplen con creces, ¿y la tercera? Pues sí y no, ya que la historia tiene un punto central muy divertido y correcto pero se encuentra con un gran “pero”: la temporada es introducción pura y dura. Estos episodios hacen un trabajo sensacional en establecer el mundo que rodea a los personajes, lo borda aún más con un sistema de poderes al más puro estilo RPG que hace que nuestro personaje esté chetado de narices pero de manera lógica, nos cuenta todo genial pero ya. Cuando acaban esos dos episodios a modo de prologo por decirlo de alguna manera vemos otros diez donde ocurren cositas interesantes pero que, al final del día, no son más que elementos para avanzar la trama con pequeñas historias autoconclusivas que siguen siendo también piezas de un puzle llamado “establecer la historia”. Entonces respondamos a la pregunta, ¿es esta primera temporada de Solo Leveling un anime que falla a la hora de la ejecución? Para nada, todo lo contrario, es un anime que la labor perfecta de establecer todo de una manera sólida y no muy lenta. Si que es verdad que hace que se sienta como un “quiero y no puedo” bajo cierto prisma pero si vas con la perspectiva de que este es el siguiente gran anime de peleas que seguramente roce los cien episodios pues esta construcción de doce episodios es necesaria. Y no solo es necesaria, si lo que viene después acompaña puede ser perfecta, ya que en este contexto son doce episodios de gran calibre y muy divertidos, pero claro, le falta ese punch, un punch que seguramente veremos en la segunda temporada. ¿Opinión final? Buen arranque que me deja con tremendas ganas de ver que viene después, pero como temporada aislada se siente que le falta algo.


En resumen, este 2024 arranca con mucho de lo que degustar. Hay de todos los palos y a muy buena calidad, y este menda ha elegido tirar por los únicos cuatro animes que están siendo doblados en simultaneo y que, de manera totalmente casual (por mi parte no por la de los que decidieron doblar estas series) resulta ser series de un corte más de peleítas y demás. Yo he disfrutado de estos cuatro animes pero había de todo donde elegir: romance, acción, comedia, etc. Un buen comienzo si vemos que no hay continuaciones titánicas y viendo que los otros nueve meses del año puede ser una mezcla de animes tochos en su contexto con algo más de vacío. Sin irnos más lejos, primavera pinta un poquito peor para mi gusto y verano puede ser la nada absoluta dependiendo de los gustos. Pero bueno, ciñámonos al presente, temporada sólida de narices.

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