El pasado fin de semana tuvimos una de las grandes citas del wrestling a nivel mundial por no decir que tuvimos la más grande. Llegó un poco más tarde a lo que estamos acostumbrados pero ya se presentó ante nosotros WrestleMania, que celebraba en dos noches de 2025 su edición número 41. Una edición que, personalmente, ha sido de las que menos ilusión y expectativas me han generado en los últimos años tanto por una cartelera aparentemente floja como por el desarrollo de las historias pertenecientes a esta. No parece que sea el único que piensa así viendo el poco revuelo que está teniendo en redes hasta el punto de que la reciente estrategia de relaciones públicas de WWE parece haber tenido más bombo y no por ser buena que digamos. Cerrando ya esos temas, veamos que tal el show y si deja esas expectativas atrás o no es capaz ni de superarlas (spoiler: es el segundo caso).
WWE WORLD HEAVYWEIGHT CHAMPIONSHIP: GUNTHER © VS JEY USO
Este fin de semana de WrestleMania arranca con el que es el combate titular mundial más dantesco que recuerdo en mucho tiempo. Para recapitular, todo empieza con Jey Uso enamorando a la fanaticada de WWE en su push individual con solamente bailar alrededor de cuatro letras: “YEET!”. La popularidad que para mí hizo merecerse un puesto en el midcard de la compañía le llevó de manera sorprendente a ganar el Royal Rumble de este año y plantarse con posibilidades reales de salir de Las Vegas como campeón mundial. Unos meses duros donde WWE intentó vendernos a un luchador mediocre y sin apenas repertorio como alguien capaz de destronar a Gunther, pero si a los fans de la compañía les encanta gritar “YEET!” y vende merchandising a patadas supongo que será material de campeonato mundial (nótese la ironía).
Dejando de lado todo lo estúpido que me ha parecido el camino hacia este combate y todas las decisiones tomadas en dicho proceso, veamos que tal el combate. ¿Os lo resumo en una palabra? Sinsentido. ¿Os lo resumo en dos? Sinsentido mayúsculo. El combate siguió la misma tónica que la historia, minutos y minutos de decisiones y acciones que no le encuentro ni lógica ni valor real. No entiendo por qué Gunther tiene que actuar como el campeón siempre dominante que ahora duda, no entiendo por qué Jey tiene que jugar al mismo juego técnico y de ataques potentes cuando no puede, en verdad no entiendo nada de nada. Y no voy a mentir, hice un esfuerzo supino por no ser escéptico, por no ser aquel luchador que se empecina en que va a ser un mal combate y aunque no sea el caso lo mantenga hasta el final. Pero nada, no puedo, Jey Uso no tiene nada en cuanto a wrestling se refiere, no tiene nada en cuanto a cualidades físicas o de personalidad que brillen, solo tiene una combinación de cuatro letras que siempre retumba de manera espectacular allá donde va (algo meritorio que hay que recordar). Su combate fue básicamente 95% Gunther llevando el peso del combate y 5% Jey haciendo un par de lanzas, planchazos desde el final y un mataleón incomprensible para ganar el combate. ¿Gunther no consigue noquearle ni hacerle rendir con un Sleeper Hold pero Jey lo consigue segundos después de colocar sus brazos alrededor del cuello del campeón? ¿De verdad quieres que me crea esto? Resultado igual de tétrico que de esperable porque ahora el tener un catchphrase que vende camisetas pesa más que todo lo demás para ser campeón mundial. Ojalá me equivoque, de verdad, pero me da a mi que va a ser un campeón cuyo hype muera tras sus primeras defensas cuando se vea que no tiene ni la fuerza ni la capacidad de estar en la posición que está.
WWE WORLD TAG TEAM CHAMPIONSHIP: WAR RAIDERS © VS THE NEW DAY
De un sinsentido pasamos a otro, no por los mismos motivos sino porque simplemente no entiendo qué hace este combate en WrestleMania y no, por ejemplo, el combate de escaleras en donde van a defenderse los otros títulos por parejas de la compañía, quizás está en el “Showcase of the Immortals” por el patrocinio de Clash Of Clans. El combate en sí tampoco dio muchos motivos para hacer un esfuerzo por intentar comprender su presencia en este show ya que a veces si lo que ocurre en el ring compensa lo demás pues pasamos cualquier falta de lógica por alto. La cosa es que no ocurrió esto, no vimos más que un combate que perfectamente podía haber ocurrido en la mitad de un show de RAW. Cambio titular más simple que la tabla del uno, sin nada especial, sin una aparición de Big E en algún sentido que hubiera cuadrado perfectamente, absolutamente nada fuera de ser lo que fue, un encuentro de show semanal, algo que no solo pienso yo viendo el silencio sepulcral de los miles de aficionados sentados en el Allegiant Stadium.
JADE CARGILL VS NAOMI
Ahora es turno del primer combate femenino del fin de semana, uno que sorprendentemente no tiene un título de por medio, algo que me alegra por el simple hecho de que las mujeres también merecen tener un lugar donde culminar historias de calibre que no tengan que ver con un título. Esta historia más concretamente es entre Jade Cargill y Naomi, un giro muy sorprendente y ciertamente inteligente al ataque furtivo que sufrió la primera hace meses. Un ataque que en principio se pensaba que era parte de otras personas y que era por el campeonato femenino de parejas, aunque acabó siendo simplemente algo motivado por los celos y la falta de apreciación. La atacante resultó ser Naomi, quien buscaba quitarse de encima a la luchadora que le quitó su espacio, su sitio, que la eclipsó y la separó de su mejor amiga. Lo dicho, para mí girito inteligente que no solo ha servido para liberar a Bianca Belair de cara al campeonato mundial femenino sino que sirvió también para que estas dos luchadoras tuvieran un hueco en este show.
La historia es interesante sin duda, el combate… pues no tanto la verdad. Quizás sea que fue ciertamente predecible, que fue corto y con un ritmo raro o que claramente la balanza en cuanto a aportación vencía más hacia un lado que el otro. Sobre esto último habló claramente de Cargill, luchadora que en estos diez minutos ha vuelto a dar un ejemplo de lo que está siendo su etapa en WWE y quizás en su carrera en general: brilla muchísimo en las demostraciones de fuerza y cojea demasiado en lo hace que un combate sea cohesivo y coherente. De verdad, alucino con la capacidad física que tiene y la imaginación que demuestra para sacarla a relucir de muchas formas distintas pero no la veo capaz de estructurar y ejecutar un combate. Es una luchadora que depende mucho de que otra lleve el ritmo y en este caso esa persona es Naomi, una luchadora sensacional que parecía no haber aterrizado de pie en su regreso a WWE aunque con actuaciones como esta y su cambio a “heel” puede servir para que vuelva a tener un merecido puesto de valor en la programación semanal más allá de ser la tercera pata de otro banco.
WWE UNITED STATES CHAMPIONSHIP: LA KNIGHT © VS JACOB FATU
Continúa el show, continúan las defensas titulares, ahora tenemos ante nosotros posiblemente la más predecible de toda la cartelera. Estaba en juego el campeonato de los Estados Unidos, LA Knight buscaba continuar con su segundo reinado venciendo al samoano Jacob Fatu aunque el ambiente respiraba fuerte a “reinado de transición” para coronar a Jacob. Al final lo obvio ocurrió pero no por ello lo visto dejó de ser menos divertido (bueno quizás si), LA Knight con el oponente correcto consigue siempre sacar combates con chicha y Jacob Fatu pues, bueno, a ver, todos sabemos que es una mala bestia absurdamente talentosa por sus capacidades físicas. El combo del carisma natural de Knight con las habilidades superhumanas de Fatu consiguieron arrancar algunas reacciones de un público de Las Vegas visiblemente muerto durante gran parte del show visto. Ese codazo de Knight, un suplex alemán desde la tercera cuerda, el Moonsault transformado en BFT... para que partirte el cráneo con cosas profundas y llenas de significado si puedes tener diez minutos de cosas molonas. Molón también el final, predecible a mayores, ya que Fatu se coronó tras dos BME sobre el campeón.
EL GRANDE AMERICANO VS REY FÉNIX
“¿Como de racista quieres ser, WWE?” “Si”. Esta fue la conversación que tuvieron que tener en la cúpula creativa de la compañía mientras decidieron los planes de Chad Gable de cara a WrestleMania 41. Tras esta discusión sesuda, decidieron crear el alter ego enmascarado de “El Grande Americano” en lo que ha sido una constante de xenofobia y falta de respeto a la lucha libre mexicana. Que si lo comentado sobre la cultura de la lucha libre, que si usar inteligencia artificial generativa en las promos, que sí decir que el luchador era originario del Golfo de México, que ni tan siquiera darle un nombre gramaticalmente coherente… WWE se ha coronado con Grande Americano aunque Chad Gable haya dado el 200% de su parte para que esto funcione. Racistada tras racistada (incluida la de los mariachis y el filtro anaranjado cutre de las películas noventeras para cuando quieren hacer ver que la trama está situada en México), el enmascarado llegaba a WrestleMania para enfrentarse a Rey Fénix, el sustituto de última hora tras la lesión de Rey Mysterio, lesión que nos quitó el ver como el SmackDown VS Raw 2011 se volvió realidad (el que entendió entendió).
Otra vez más tuvimos un combate correcto pero corto, otra vez más que vimos un encuentro de unos diez minutos algo meh donde destacaron uno o dos momentos puntuales. Una pena si te pones a pensarlo sabiendo de lo que es capaz Rey Fénix y de cómo de bien se ha adaptado Gable a esta nueva faceta y estilo. Prueba de esto es el absurdamente espectacular 450 Senton que se sacó de la manga Americano. Aun con esas no hubo más, quizás porque no dio tiempo para más. Vimos una secuencia brutal, un poquito de lo que es Fénix y ya está, Americano se llevó la victoria tras un Diving Headbutt precedido por una triquiñuela muy inteligente llamada “ocultar una placa metálica en la máscara”. Lo dicho, no estuvo mal pero es que pudo estar muchísimo mejor.
WWE WOMEN'S CHAMPIONSHIP: TIFFANY STRATTON © VS CHARLOTTE FLAIR
La rivalidad entre Tiffany Stratton y Charlotte Flair es, sin duda, una cosa, qué cosa exactamente no sabría decir porque madre todo lo que ha ocurrido. Si tienes un colega que no entiende la diferencia entre “kayfabe” y “shoot” le pondría los segmentos semanales entre estas dos. Que espectáculo más dantesco, Charlotte Flair haciendo todo lo posible por demostrar que los rumores del politiqueo en el backstage son reales saboteando constantemente a su oponente hasta el punto de que la campeona mandó a la mierda un segmento tanto por vendetta personal como por no quedar en el absoluto de los ridículos. Por primera vez en mucho tiempo he visto algo en WWE que parece real porque, en definitiva, lo fue, y si alguien quiere venderme la moto de que esto estaba planeado puede irse olvidando de conseguirlo porque todos sabemos que es mentira. Dejemos esto y pasemos al combate per se, y resumiendo diría que es otra lucha meh. A diferencia de otras no es por culpa de tiempos, de no tener espacio para brillar o que los luchador@s no dan la talla, esto es una cuestión de química puramente hablando. El combate lo he sentido inconexo, sin mucha alma y que no me ha generado un algo dentro que hiciera que estuviera al 100% con la lucha. Quizás era que una vez más el público parecía estar de funeral, que en mi cabeza solo resonaba lo ocurrido estas semanas o que simplemente estas dos luchadoras no tienen química alguna entre ellas. Si dos wrestlers, por muy buenos que sean, son incapaces de cohesionar y compenetrarse sobre la lona es difícil rascar algo, así de simple. Le puede pasar a Tiffy y Charlotte como le puede pasar a Danielson por ejemplo, si dos oponentes no casan no hay mucho más que hacer. Veinte minutos donde lo sorprendente fue no la lucha sino el final ya que Stratton consiguió seguir siendo campeona gracias a su Pretiest Moonsault Ever. A otra cosa mariposa, supongo.
CM PUNK VS SETH ROLLINS VS ROMAN REIGNS
¿Que daría CM Punk por conseguir su ansiado main event en WrestleMania? Aparentemente todo, tanto en el kayfabe como en la vida real. Una espinita clavada que Phil quiere quitarse y que va a conseguirlo a la edad de 47 años. Un evento estelar del “Showcase of the Immortals” ciertamente convulso, un combate construido por muchos frentes abiertos. Primero, por la enemistad entre Punk y Roman Reigns tanto por lo acontecido en el Rumble como por los recelos del jefe tribal del oriundo de Chicago, quien fue el protegido de Paul Heyman. Segundo, entra en acción un Seth Rollins que parece que no iba a formar parte de esta historia pero que su puro odio por Punk hizo que acabara entrando en el combate. Una historia convulsa como he dicho, construida y llevada al show de la no mejor forma posible en mi opinión pero con muchas posibilidades abiertas. ¿Será Paul Heyman determinante? ¿El favor de estar en la esquina de Punk hará que abandone a su jefe tribal de forma definitiva? ¿Cuál será el as bajo la manga de un Seth Rollins que parte en desventaja? Sin duda un combate interesante y llamativo del que hay ganas y expectativas, más aún cuando tiene la labor de salvar una primera noche de WrestleMania ciertamente mala.
¿Consiguió este combate salvar la primera noche? Pues la verdad que no, para qué mentir. ¿Fue entonces una lucha que no estuvo a la altura? Nada más lejos de la realidad, fue un muy buen cierre a esta primera noche, con unas cuantas pegas en mi humilde opinión pero una muy buena lucha. Básicamente vivió de las vibras, del hype, del mojo, del rollo que mola. Vivió de que Punk entró con Living Colour tocando en vivo, de que Roman Reigns tiene un aura de jefe final brutal, de que Seth Rollins es todo el carisma que puede dar el entretenimiento deportivo, vivió de que estos tres son atemporales y desprenden una magia especial. Quizás vivió demasiado de eso, de que este era el tan ansiado “main event” de Punk, algo que tenían que recordar cada cinco minutos cómo el “¿dónde está Poochie?” de Los Simpsons, algo que también respira cierta hipocresía para un fan de AEW como yo viendo que este era su “night 1 of a buy-one-get-one-free extravaganza”. De lo que sí que no me quejo es de Paul Heyman, algo que explicaré más adelante, aunque en la construcción del show fue algo que me chirrió por varios motivos. Volviendo de nuevo a la acción, tuvimos media horita de wrestling que me encantó de principio a fin aunque volvió a sufrir el problema de que hubo cositas que no me gustaron en exceso. Yendo a lo que me gusta de la lucha tengo que decir que estos tres se entienden a la perfección en el ring, una sensación de que podrían repetir este encuentro noche tras noche y que todos serían luchas geniales de principio a fin. Sobre todo destacar la labor de Roman Reigns, que combate del samoano, que exhibición del jefe tribal, el MVP de este evento principal, ejemplo perfecto de que cuando se presta a ello es un luchador absurdamente bueno y absurdamente entretenido. Si esto lo combinamos que Rollins es la navaja suiza del wrestling y cumple con lo que le eches pues más que Punk es wrestling en vena aunque ya no esté al nivel de antes apaga y vámonos. A mayores, como buena triple amenaza hubo secuencias entre todos los participantes, algunas muy buenas como ese Doomsday Device y otras que me chirriaron como los distintos “finisher-fest” vistos. Volviendo a lo que me chirría, junto a esas secuencias de finisher tras finisher vimos momentos de melodrama y secuencias (las malas) al más puro estilo NXT de Triple H que me sacaron de la lucha. En momentos sentí que el ritmo tan bueno del combate se rompía y que, por ende, no veía necesidad de incorporar dichos momentos. También tengo mis pegas con CM Punk (y no desde un resentimiento de un pro-AEW lo juro), a pesar de que no hizo una mala actuación se que puede hacerlas mejores, quizás es que la edad ya pesa o que simplemente ha luchado esta noche bajo un estilo que no es tan bueno como el mostrado en AEW o incluso en la propia WWE en esta segunda etapa.
Dejando esto atrás vayamos al final porque madre mía que final. No se si fue predecible pero lo que sí que tengo claro es que fue la decisión y la ejecución correcta. Cuando el combate entraba ya en sus compases finales, Paul Heyman tomó el protagonismo al que estaba destinado de tener. Primero en una secuencia entre Punk y Reigns donde el manager traicionó al de Chicago con un golpe bajo cuando este iba a atacar a Reigns con una silla. Lo sorprendente no fue esto, fue lo que ocurrió después, ya que Paul volvió a realizar la misma secuencia con Reigns para servirle la victoria a Rollins en bandeja de plata. Quien parecía ser el tercero en discordia y que no tenía vela en este entierro acabó llevándose la victoria y un aliado sumamente valioso en un final simplemente SU-BLI-ME. No fue un main event perfecto la verdad aunque es imposible negar que fue uno muy muy bueno.
WWE WOMEN'S WORLD CHAMPIONSHIP: IYO SKY © VS BIANCA BELAIR VS RHEA RIPLEY
Dejemos de lado la primera noche y centrémonos en la segunda, y que mejor para arrancar el que para mí debería de haber sido el evento estelar del sábado: el combate a tres esquinas entre IYO SKY, Bianca Belair y Rhea Ripley por el campeonato mundial femenino. Debía de serlo por historia o por el nivel de las participantes y al final debió de serlo por el nivel de combate. Que quince minutos niño, que lucha, prueba fehaciente y sólida de que esto de que los combates de tres sensacionales no es solo cosa de AEW visto lo visto. Fue todo lo que quieres que un combate de este estilo tenga, acción sin parar entre las tres luchadoras tanto en todas las iteraciones de 1v1 posibles como en los spots visualmente atractivos entre todas las participantes. Especial hincapié en esto, ya que si la rivalidad en estos meses pudo sentirse como que SKY sobraba incluso siendo la campeona, en este combate ha ocurrido todo lo contrario porque básicamente la nipona brilló por igual o incluso más que la australiana y la norteamericana. Todos esos spots y toda esa química brillante tenía que cerrar con un final a la altura y que mejor que con IYO marcándose un Jeff Hardy para llevarse una victoria increíblemente sorprendente porque nadie la daba por factible. Moonsault brutal mientras Belair realizaba la cuenta de tres a Ripley tras un KOD para seguir reinando.
DAMIAN PRIEST VS DREW McINTYRE
¿Qué mejor forma de ponernos a tono para una lucha callejera sin reglas entre dos malas bestias? Pues que uno entre bestido como el puto Doom Slayer (este es el WrestleMania de los patrocinios de videojuegos parece ser) y el otro tenga al putísimo Kerry King de Slayer tocando tu tema de entrada. Con la motivación metida en vena y con mi corazoncito de metalero conquistado arrancaba esta batalla campal que no fue una de las mejores luchas violentas que han visto mis ojos pero que divertida fue un rato. Dentro de lo poco sangrienta y brutal que suele ser la WWE, tuvimos una pelea campal que cumplio de sobra en los estándares comentados usando mucha silla, mucha mesa y una escalinata metálica de manera molona. Una lucha de menos a mal con un final bastante brutal, ya que Priest, tras comerse dos mesas tras caer de la tercera cuerda al exterior, decidió merendar bota con silla cortesía de un escoces loco. Como lo estáis leyendo, Drew decidió dar por cerrada esta “Sin City Street Fight” con una Claymore absolutamente brutal contra una silla para el disfrute de todos. Corto pero ciertamente intenso la verdad.
WWE INTERCONTINENTAL CHAMPIONSHIP: BRON BREAKKER © VS PENTA VS FINN BALOR VS DOMINIK MYSTERIO
De combate divertido a otro combate divertido, ya que dejamos la violencia de las calles de Sin City (nótese la ironía) a cuatro luchadores únicos por cosas distintas dándose pal pelo por ver quien abandona WrestleMania como campeón intercontinental. El absurdo portento físico de Bron Breakker defendía su título ante el enmascarado Penta, el veterano Finn Balor y el “hijo” de Eddie Guerrero llamado Dominik. De esta lucha me quedo que brillaron los dos que tenían y debían brillar ya que para mi de este WrestleMania salieron claramente reforzado los dos jóvenes con futuro de la lucha. Por un lado Bron dio una exhibición digna de Son Goku chuzado con mil tipos de esteroides porque quería ver hasta dónde podían llegar sus capacidades físicas, aprovechaba cada oportunidad de salir volando para llevarse por delante a cualquiera para hacerlo de la manera más épica y molona posible. El otro es Dominik, alguien que lleva mereciendo lo que le ha ocurrido en esta noche desde hace muchísimo tiempo por el tremendo trabajo que ha hecho en su faceta de villano tras separarse de la tutela de su legendario padre. No solo demostró el nivel que tiene entre las ovaciones de una fanaticada que quería verlo ganar sino que cumplió esos deseos para convertirse en el nuevo campeonato intercontinental vía “Frog Splash” marca de la casa del “Latino Heat”, nunca mejor dicho viendo como le arrebató el título a su compañero de Judgement Day.
RANDY ORTON VS ???
Que buena pinta tiene esta segunda noche y que rápido se fue a la mierda, empezando la debacle con este combate. Tras la trágica noticia de la baja de Kevin Owens debido a una grave lesión, Randy Orton se quedaba sin combate para WrestleMania 41, el que era su vigésimo magno evento, decidiendo realizar un desafío abierto a cualquier valiente que se atreviera a enfrentarse a la víbora. La respuesta fue curiosa y ciertamente celebrada, ya que Joe Hendry cogía este hueco para ganarse un merecido momento WrestleMania. Nadie ha sabido venderse mejor en este mundillo que Hendry, quien ha encontrado en esta alianza una oportunidad única de hacerse un hueco de valor en la escena mundial de la lucha libre. Viendo esto, ¿por qué la debacle empezó aquí si la elección del rival sorpresa ha sido buena? Pues porque el campeón mundial de TNA básicamente hizo un jobbeo de tres minutos. Hendry vino, tuvo su momento frente al público, se comió un RKO ciertamente cómico y para casa. Básicamente fue una patada a la entrepierna de TNA ya que su campeón mundial fue ciertamente ridiculizado en tres minutos. No se vosotros pero yo pasé volando del “me alegro por Joe Hendry” al “WWE acaba de reírse en la cara de TNA”.
AJ STYLES VS LOGAN PAUL
De combate malo a combate malo. Era turno de este AJ Styles contra Logan Paul, duelo entre una absoluta leyenda del deporte y un absoluto personaje de la vida, combate entre alguien amado por todo el mundo incluido Japón y un youtuber que si pisa dicho país acaba apaleado o en la cárcel. Sinsentido mayúsculo del que esperaba que AJ rascara algo pero que nada, esperaba acabar decepcionado y al final ocurrió eso aunque me llevé una buena noticia: esta es la prueba fehaciente de que Paul es un fraude en el ring. Ponerte a bailar con una pareja así puede elevar tu combate o puede incluso hacerte quedar mal por la clara diferencia de nivel. Esto es lo que ocurrió en esta lucha, una diferencia abismal. Al final se vio lo que llevo diciendo que es Logan Paul durante todo este tiempo, alguien movido por el hype y por su capacidad atlética pero que no sabe realizar muchas de las cosas básicas de este deporte. Si, tiene un atleticismo encomiable y sabe realizar movimientos chulos con una facilidad sorprendente, la cosa es que le cuesta horrores estructurar y llevar el ritmo de una lucha, su selling puede ir desde flojo hasta tétrico y su faceta de villano no va más allá de ser alguien que consigue abucheos fáciles por ser básicamente un ser humano de mierda. Esto es Logan Paul, un luchador que arroja 10 movimientos muy chulos durante quince minutos pero que es incapaz ni de conectarlos ni de ordenarlos de manera coherente o de, al menos, de que tengan cierta alma. Al final, y para desgracia de todos aunque que la lucha acabase no fue una desgracia sino una alegría, Paul se llevó la victoria gracias al Mass Driver de Kotaro Suzuki que ha adoptado como finisher.
WWE WOMEN'S TAG TEAM CHAMPIONSHIP: THE JUDGEMENT DAY © VS LYRA VALKYRIA VS ???
De mi odio generacional y eterno a Logan Paul pasamos a una de las mayores guarradas vistas a una luchadora que han visto mis ojos. Bueno, quizás una de las mayores no pero eso no quita que no sea una guarrada ciertamente grande. Estoy hablando de Bailey concretamente, quien ha visto cómo todas sus opciones para el fin de semana de WrestleMania han ido cayendo una a una hasta quedarse sin combate. Primero dijimos adiós a su rivalidad con Roxanne Perez, luego a verla contra Lyra Valkyria por el campeonato intercontinental femenino y, por último, nos quedamos sin Bailey en WrestleMania aunque fuera para ganar los campeonatos por parejas por una lesión. Dicha “lesión” no fue más que una forma de darle a Becky Lynch un regreso a la programación semanal de WWE, un regreso que se podría haber dado de otras formas distintas sin necesidad de sacrificar y/o sacrificar a una de las luchadoras que más ha dado/hecho por la división femenina de WWE. Aclarar que la culpa no es de Becky, tampoco de la propia Bailey, la culpa de esta decisión desastrosa es básicamente de unas mentes creativas que no pensaron alguna otra forma de materializar este regreso. ¿Al menos podemos decir que la lucha mereció la pena? Pues tampoco mucho, lucha nivel de la programación semanal, lucha que acabó con Lynch consiguiendo otra corona y con Lyra como doble campeona.
UNDISPUTED WWE CHAMPIONSHIP: CODY RHODES © VS JOHN CENA
Cosas imposibles pueden pasar, hasta que el infierno se congele, nunca pensaba que John Cena iba a hacer ese siempre pedido “heel turn” pero aquí estamos. Cual hecho impensable porque lo era, John Cena traicionó a sus ideales y a sus fans atacando a Cody Rhodes con la ayuda y beneplácito de The Rock, sus ganas de ganar “el diecisiete” pudieron con “Hustle, Loyalty, Respect”, las tres palabras que construyeron su legado. Una decisión que podía haber tomado por muchos motivos como que su tiempo estaba acabando y necesitaba ese campeonato mundial de cualquier forma y que tanto WWE como los participantes decidieron vender de la peor forma posible. Cena traicionó a los fans porque estaba harto, harto de no recibir ni el respeto ni el cariño que merecía, no quería seguir siendo ese payaso de circo que entretenía a costa de su propio beneficio y beneficio. Cena quería acabar con esto y no solo eso, quería acabar con lo que amaban: Cody, el campeonato de la WWE y la lucha libre. La construcción no fue la correcta en mi humilde opinión, la forma de construir a este “heel Cena” podía haber sido bastante mejor y podría no haberse sentido de esta manera ciertamente decepcionante. Aun con esas tenía muchísimas ganas de ver este duelo y muchísimas esperanzas de presenciar un resultado único en la historia: ver a John Cena convertirse en histórico llevándose por delante a la actual cara de la WWE para comenzar su reinado del terror.
Aunque el camino a este combate no fuera todo lo bueno que esperaba, albergaba una gran esperanza y convencimiento de que la lucha iba a compensar esto. Sabía que no iba a ser un combate de cinco estrellas pero estaba convencido de que iba a estar a la altura. Se que John no es físicamente el de antes y que Cody no es una máquina de clásicos instantáneos pero la cosa de ver a Cena trabajar un combate como “heel” contra la persona que mejor sabe trabajar las luchas como “face” dentro de la compañía me generaba ciertas expectativas. Al final tuvimos eso y no es que estuviera nada mal, no fue excelso pero no malo, solamente le faltaba un final que elevará y diera sentido a todo lo visto, cosa que desgraciadamente no ocurrió. Este main event era un combate de momentos, no era como otros enfrentamientos en el mundo de la lucha libre donde la completitud del combate importaba, este era uno donde un buen highlight final memorable elevaría e incluso compensaría lo demás aunque uno malo podría echar por tierra todo. La cosa es que acabó ocurriendo lo segundo.
John Cena consiguió convertirse en el luchador con más campeonatos mundiales en la historia del wrestling tras vencer a Cody Rhodes y, sinceramente, se sintió increíblemente vacío. John Cena hacía historia pero la forma de lograrla fue tan carente de cualquier emoción e impacto que se llevó por delante este momento. Cody veía el final de su legendario reinado gracias a la interferencia de… ¿Travis Scott? Un noqueo del árbitro y distracción a manos del rapero le sirvió en bandeja la victoria al exlíder de la Cenation quien solo tuvo que golpear a Rhodes con el campeonato para hacer historia. Viendo esto yo me pregunto lo siguiente: ¡¿Qué h*stias pinta Travis Scott en un momento como este?! ¡¿Dónde cojones está Dwayne Johnson?! ¡¿De verdad esta es la forma de acabar con el reinado del hombre que destronó al jefe tribal?! Un final a esta historia que no solo me deja frío, y que una cosa de este calibre me deje así tiene que ser delito, sino que me deja completamente vacío y sin ninguna gana de saber que va a ocurrir a partir de este punto. Que forma tan tétrica de darle a John Cena su reinado mundial número 17, que forma más lamentable de dar final al reinado del que ha sido durante un año la cara de tu empresa y de la mejor forma imaginable. Que mal.
Sin duda alguna este es uno de los peores WrestleMania de los últimos años, quizás el último del que salí con esta sensación fue la edición de 2018 (el de la pandemia no lo cuento por motivos lógicos). Fue por muchos motivos, siendo los más destacados el tener una construcción mala, el contar una cartelera ciertamente floja e intrascendente cuando en años anteriores lo bordaron de una forma u otra y el usar en exceso figuras mediáticas que aportan poco o nada. Esto último es importante ya que este WrestleMania se ha sentido más como una colección de luces y famosos tanto en el ring como en el graderío que un show de lucha libre en condiciones, un show donde el wrestling era secundario. Y esto no es una opinión, es que de las poco menos de ocho horas que duró el show los combates ocuparon unas tres horas y media. Dato mata relato, y el dato es que el wrestling solamente tuvo un 43% aproximado del tiempo en este finde de WrestleMania. El “durante” no fue bueno, el “antes” tampoco tanto por el desarrollo de las historias como por cosas externas (la semana de PR que tuvieron antes de este finde ha sido la más desastrosa en muchísimo tiempo), solo queda saber si el “después” va a serlo. Hay mimbres, pocos pero los hay, y si de verdad WWE quiere revertir unas críticas que han vuelto a resonar tras muchísimo tiempo sin hacerlo por el buen trabajo de la empresa pues tendrá que espabilar y redirigir el curso de esta nave. De momento no podemos hablar de eso y solo puedo decir lo siguiente: que WrestleMania más flojo.