“¿Y qué veo yo?” Esa fue mi reacción al ver la temporada de invierno, una donde no he visto nada que destaque como faro costero en una noche de niebla densa a la vez que había muchísimas cosas para copar el poco tiempo libre que tiene mi vida adulta. Gracioso y paradójico cuanto menos, no mucha cosa destacada pero sí mucha cosa que querer ver. No se si acerté con mis decisiones o si resulta que me he dejado un bombazo fuera pero aquí va mi ya típica review de los animes de temporada, siendo turno esta vez de la primavera de 2025.
MY HERO ACADEMIA: VIGILANTES
Dentro del mundo de My Hero Academia, el Studio Bones nos trae un poco más de este universo animando un spinoff precuela de la obra original, el conocido como My Hero Academia: Vigilantes. Esta obra nos presenta a Koichi, un proyecto de superhéroe fallido ya que su poder de deslizamiento no deja de ser poco más que cutre. Aun con esas, y tras intentar de manera fallida salvar a la idol callejera local PopStep de unos desalmados, este acaba de manera forzada bajo el tutelaje del héroe ilegal Knuckleduster. Con un nuevo mentor, y la cierta ayuda de Pop, el conocido como The Crawler pasará de ser un recadero de poca monta a un vigilante de renombre en la zona mientras hacen frente a distintos villanos potenciados que surgen de la nada y buscan el origen de esta amenaza.
La verdad es que Vigilantes me ha pillado un poco por banda en el mal sentido de la expresión. Acudía a este anime pensando que sería una buena puerta de entrada al universo de My Hero Academia viendo que era un spinoff precuela y que trataba el concepto de justicieros sin poderes y no reconocidos por la ley, algo que me llama muchísimo mas que las típicas tropelías de superhéroes. La cosa es que ni sabría decir si es una buena introducción a este universo y tampoco me parece apasionante la vida de los “vigilantes”. Me gustan los personajes y ver como su día a día se desarrolla bajo esta nueva máscara justiciera pero yo esperaba otra cosa, algo que me da en su cierta medida los dos personajes top de la temporada: Knuckleduster y Kuin Hachisuka. Lo hacen porque, a parte de que uno es una personificación maravillosa del concepto que esperaba ver de los vigilantes y la otra es un villano la mar de interesante, son quienes desarrollan la historia de principio a fin. Eso es lo que siento yo, que el protagonista principal es Koichi junto a PopStep y al vigilante mencionado (aunque estos dos de cierta manera segundaria dentro del primer plano) pero quien de verdad hace avanzar todo es Knuckleduster en su cruzada personal por encontrar el origen de los malos malosos megamutantes por motivos que se descubrirán el el final de la temporada. Dicho esto, My Hero Academia: Vigilantes sigue siendo un anime entretenido aunque está lejos de ser lo que esperaba por esto de que se queda en tierra de nadie: no es un anime de antihéroes que buscan acabar con el malo por un motivo profundo ni es una pizquina de slice-of-life con cierta acción. Tanto por trama, por personajes, por mundo... se me queda corto aunque es innegable que ha resultado ser una visualización ciertamente entretenida.
LOS HIJOS DE LA FAMILIA SHIUNJI
La familia Shiunji, formada por un padre y siete hermanos, vive cómodamente (y tanto viendo la pasta que parecen tener) en Tokio, donde nuestro protagonista Arata intenta seguir su vida de instituto a pesar de que su vida amorosa no le esté yendo bien, que su familia le de la lata y que… ¡SU HERMANA PEQUEÑA SE LE DECLARASE! En fin, cositas que ocurren en el anime, supongo, esperemos que el pobre Arata tenga un poco de tregua, ¿no? Ja, por el forro de los… ya que su padre revelará a sus siete hijos que, salvo dos de ellos, ninguno comparte enlaces de sangre. Esto sin duda hará que la convivencia cambie por completo y quizás por ello, ¿florezca el amor bajo ese mismo techo?
Reiji Miyajima, hijo de la gran “algo”, lo has vuelto a conseguir, has vuelto a crear una obra dantescamente divertida. Sin duda, este anime lleva el sello del mangaka e incluso podemos decir que hasta lo mejora. “¿Estás borracho, Javi?” Pues pueda ser pero aunque a algunos les joda pues tengo cierta razón. Con Rent-A-Girlfriend, el bueno de Reiji ha llevado hasta el extremo lo dantesco pero divertido, y con Los Hijos de la Familia Shiunji ha elevado esa fórmula con un anime harem que exprime todo lo estúpido del género para hacer algo divertido. A mayores, la sensación que transmite esta obra es que en esta el mangaka anda mas suelto e hila más fino que con su gallina de los huevos de oro, quizás porque no tiene ni la presión ni la necesidad de vender con esta obra secundaria que sí supongo que tendrá con su contraparte. A mayores de toda la divertida estupidez con la que cuenta un harem romcom de este palo, el anime cuenta con un prota sensacional que hace todo lo posible para que su madurez supere a su adolescencia, una animación preciosa por parte de Doga Kobo (están que lo parten últimamente), unos personajes geniales como Banri y el propio Arata y, por qué no decirlo, esa chorrada de “jaja parece incesto pero técnicamente no lo es”. No lo se, Reiji Miyajima y sus obras no son para todo el mundo de manera entendible pero yo os aseguro que este es un pifostio extrañamente divertido la verdad.
AHAREN SAN WA HAKARENAI (T2)
Es turno de hablar de la primera secuela de esta tanda primaveral, una que llega justo tres años después de la primera temporada. Esta secuela es la de Aharen-san wa Hakarenai o Aharen-san Is Indecipherable para los que no sepan japonés. En este caso no haré resumen de la trama porque viene siendo un calco de lo ocurrido en la primera salvo con giritos: Aharen y Raido siguen viviendo un día a día curioso debido al secretismo tras la simpleza de Aharen y la creatividad/imaginación de Raido, a quienes debemos de sumar a los amigos de la primera temporada, a una chica gal nueva que resulta ser todo lo contrario a lo que representa esta tribu urbana anímicamente hablando y al detallito de que ahora estos dos son una parejita de tortolitos la mar de maja. No tiene más, ni con estos añadidos se diferencia de la primera tanda de doce episodios de este anime, para lo bueno y para lo malo. Solo se nota puntualmente el añadido de Riku pero en su medida comentada, el resto es un calco de la fórmula ya presentada por esta obra. ¿Es algo malo? Pues no la verdad, este anime nunca ha buscado ser algo más que una obra divertida y ligera, y aunque esta segunda temporada sea un clon sigue cumpliendo en eso de ser divertido y ligero, vamos un pasatiempo alegre para el espectador. Lo dicho, no tiene chicha ni reinventa la rueda pero para que más, supongo.
WIND BREAKER (T2)
Continuamos con la tanda primaveral y es turno de la segunda y última segunda temporada, valga la redundancia, siendo esta la continuación de WIND BREAKER. Tras dejar la primera tanda de episodios un cliffhanger ciertamente grande que sirvió para dar arranque a la continuación, nuestra clase de primero del Furin buscan atacar la base de la nueva banda llamada KEEL para rescatar a un amigo de uno de los compañeros de dicha clase. Una batalla campal que abrirá esta temporada, una donde las peleas no serán todo y donde se esconden más secretos e intenciones ocultas de la que puede apreciar el ojo humano.
Sorprendentemente, la continuación de un anime de peleicas como WIND BREAKER me ha gustado mucho, y digo lo de sorprendente porque las golpizas varias quizás sean de los últimos en la lista de motivos de esta decisión. Más sorprendente aún si tenemos en cuenta que los dos primeros episodios son uno de los mejores arranques de un anime en "big 2025", unos 45 minutos de peleas estúpidamente bien animadas con musicote estilo rock/punk/metal indie japonés de fondo. La cosa es que los puntos positivos los brindan todo lo contrario a la acción, haciendo referencia con esto a los personajes y los momentos de paz y emotividad que surgen de una milicia formada por adolescentes que está por y para el pueblo. Ver el crecimiento de Haruka, quien pasa de ser un paria por decisión propia a dar el salto para confiar en sus compañeros y amigos a pesar del temor de ser abandonado de nuevo, es una delicia. También lo es ver a personajes como Tsubaki, la chica trans del Furin quien resulta ser un personaje la mar de divertido y alegre (incluso convirtiéndose en mi personaje favorito de la serie) a la vez que sirve como hilo conductor del episodio más bonito de la temporada y del arco de peleitas que copa la segunda mitad de estos doce episodios. Resumiendo, WIND BREAKER sigue haciendo lo suyo de manera genial, sin ser perfecto porque tiene sus pegas pero acertando en lo que es: un anime de peleas colorido y con personajes variopintos que te enamoran por como lucen y quien son. Con ganas de ver una tercera temporada que espero que llegue pronto, y por pedir pues que le hagan un doblaje o algo (ejem Crunchyroll ejem).
WITCH WATCH
Morihito Otogi es un estudiante normal y corriente de secundaria, o eso aparenta, ya que en realidad proviene de un linaje de demonios, dotándole de una fuerza sobrehumana que ha conseguido ocultar a lo largo de los últimos años. Por situaciones de la vida, acaba convirtiéndose en el familiar de la bruja en prácticas Nico Wakatsuki, amiga de la infancia a la que lleva sin ver desde la niñez. La elección viene por parte de la madre de la bruja, quien ha visto en una profecía que su pequeña correría peligro, siendo Morihito el elegido para protegerla de todos los males que surjan. Esto es tarea ciertamente difícil cuando Nico se muda a su casa, el combo de tener una bruja apasionada por ayudar con sus poderes pero que resulta tener menos luces que un barco pirata llevará al joven del clan demonio a partirse el cráneo para protegerla en situaciones desternillantes, también dando lugar a escenas donde Nico intentará conquistar al que es su familiar y el amor de su vida, con tronchantes resultados también.
La última de esta lista, también la última de la temporada que me he empezado a ver, coincidencia curiosa cuanto menos. A diferencia de otras series por lo comentado, WITCH WATCH está cayendo algo más del tirón hasta ponerme al día y, por ello, están más frescos los sentimientos y opiniones sobre los capítulos vistos. Con solo habiendo visto siete de los episodios disponibles, mi veredicto es el siguiente: es una gilip*llez de manual, me encanta. Si de WIND BREAKER comentaba que los dos primeros episodios son de los que más me he venido arriba con un anime de peleas, los primeros de esta historia de brujas y demonios habrán sido con los que más me he reído en bastante tiempo. La cosa es que, a partir de ese punto, mis sensaciones han sido más variadas para lo bueno y para lo malo. Lo malo es que en los episodios restantes he seguido viendo ese humor pero sin tanto punch o sin pillarme tan desprevenido como al principio, habiendo dosis de risas pero no tantas como las que esperaba viendo el arranque. Lo bueno es que sigue habiendo humor y que también, como buen slice-of-life con elemento romanticón, podemos ver hacia donde y como avanza la relación entre Nico y Morihito, además de ver cual es esa premonición oscura sobre el futuro de la joven bruja. En resumen, WITCH WATCH es un anime que no tiene nada brutalmente novedoso o mejor que otros animes del genero, no es rompedor y dependiendo de la persona puede hacerse hasta ciertamente tedioso pero el toque de humor que tiene en ciertos momentos, algo que se ve más en unos episodios que en otros, es tan bueno por el factor “estupidez” gracias al combo de personalidades de los protagonistas que engancha de verdad. Veremos cómo avanza hasta esa conclusión (¿de la primera temporada?) en el episodio 26.
Esta temporada de verano ha sido el Crystal Palace de las temporadas de anime. Para los no futboleros, el combinado inglés es la definición de pasar por la liga y no destacar. Desde su ascenso a la Premier League hace doce años, el combinado londinense siempre ha estado entre los puestos 10 y 15, sin acercarse lo más mínimo a competiciones europeas pero tampoco sudando la gota gorda por evitar un descenso. Esta temporada primaveral ha sido básicamente esto, mucho anime bueno y mucho anime malo pero sin salirse de la franja de lo aceptable, bailar entre el 6 y el 8, ninguno destacando por su genialidad y tampoco por su catastrófica emisión. En verdad no está mal, saber que elijas lo que elijas no vas a comerte un bodrio estelar es algo que se agradece. A título personal, ¿he dejado cosas en el tintero? Pues si, me apetecía verme también títulos como Kowloon Generic Romance o Lazarus aunque estoy contento con mis elecciones. Con la temporada acabada ahora si que hay que rezar para sacar horas de entre las piedras porque no recuerdo un verano tan cargado de anime en todos estos años que llevo siguiendo el medio nipón semana a semana.