Tras un ciertamente decepcionante álbum llamado Tether, que vino después de la que considero su magnum opus, Of Mice & Men regresa con Another Miracle, su ultimo LP tras dos años desde su anterior disco. Sin haber escuchado nada hasta su lanzamiento y con ganas de saber si volveré a ver algo del estilo de Echo, os dejo mi opinión tras un par de reproducciones, un álbum que cumple de manera ciertamente sobrada pero que me deja ciertamente decepcionado por no alcanzar unas expectativas o por no ser lo que yo esperaba y deseaba que fuera.
Tras dos años de un ciertamente decepcionante álbum llamado Tether, la banda regresa con este Another Miracle, un LP de doce canciones que, independientemente de la calidad general del disco, tiene dos mitades diferenciadas no por temática sino por otro motivo que comentaré posteriormente. Arranca todo con A Waltz, uno de los mejores temas del disco sin duda gracias a un arranque explosivo con muchos matices que recuerda a los temas favoritos, siendo uno un cierto tono oscuro y atrapador tanto en sonido como en letra como lo visto en algunos temas de Echo. A este arranque le sigue uno de los sencillos que publicó OM&M para promocionar el álbum y uno de los temas que menos me gustan del disco, Troubled Water, gracias a ser una canción que suena bien pero que ya si empiezas a ahondar se siente genérica, como si cuando se pasase la novedad sonase como cualquier otra canción de la banda o simplemente como otras canciones del metalcore, pero esta es mi opinión personal. Ahora es el turno de otra de mis canciones favoritas del LP, Safe & Sound, sin duda una mezcla de elementos muy originales como el uso de partes electrónicas juntado con todo lo que funciona de la banda: la batería de Valentino, la guitarra bien grave y la angelical voz melódica de Aaron Paulie que ni tiene que recurrir al gutural (un poquito de fondo pero bueno). Tema redondo con un estribillo estúpidamente pegadizo, quizás el que más de todo este Another Miracle, y un final lentito que me recuerda tanto a esos temas tan buenos como Timeless o Fighting Gravity. Seguimos el ritmo de tema bueno seguido de tema malo con Hourglass, ya que si antes decía que todo casaba perfecto y que Paulie dejaba atrás el gutural, este tema es justo lo contrario, un conjunto de cosas que no le encuentro cohesión ni siquiera en un estribillo que a lo mejor ni te enteras de que es tal. Repitiendo la norma anteriormente explicada, OM&M nos presenta Wake Up, el tema más melódico del álbum donde las notas destacadas son otra vez Paulie y una guitarra rítmica que se cuela gracias a que el resto de instrumentos toman un cierto rol secundario, quizás por eso cuando aparecen en el puente suene tan espectacular. Temazo vamos. Para acabar con esta primera mitad comentada tenemos Flowers, donde el componente electrónico aparece en la primera mitad del tema, una mitad más relajado que da paso a un estribillo pegadizo, después volviendo los gritos y la guitarra en la segunda mitad, una fórmula que os prometo que volveremos a ver más veces.
Acabada esta primera mitad llega donde el álbum decae para mí, quizás porque mis temas favoritos se encuentren en la primera media docena, quizás porque la sensación que tengo es que la creatividad y la inventiva acaban con la pista número siete. Esta pista siete es Another Miracle y no me gusta, el motivo es quizás el mismo que el de Troubled Water, suena bien pero se siente genérico o ya visto antes, como si hubieran cogido una pista de Defy y haberle tocado cuatro cositas, quizás esté en mi mood más tiquismiquis. Sigue Contact, tema donde la única queja que tengo es… ¿la letra no es muy rara? Lo demás está correcto, los riffs retumban de narices y el estribillo es la enésima iteración de Paulie atrapándote en algo pegadizo. Ahora porque puedo me permito el lujazo de analizar las tres siguientes de una sentada: Parable, Somewhere In Between y Swallow. ¿Por qué hago esto? Pues porque esto suena a algo o ya escuchado por repetir una fórmula ya usada de manera calcada en el propio álbum o porque suena demasiado a trabajos anteriores (esto es bueno o malo dependiendo de vuestra opinión). Quizás la que más me llame es la tercera de estas tres por tener un estilo más Defy. Para cerrar, OM&M termina este Another Miracle de manera bastante decepcionante con Infinite, quizás porque sea el tema más meh de todo el disco, el más olvidable sin duda.
Sinceramente, quizás mi opinión de lo que supone Another Miracle en su conjunto es rara o, al menos, suene estúpida para quien haya leído este texto. El último álbum de Of Mice & Men suena bien, en algunos momentos de la primera mitad más concretamente suena estúpidamente bien, pero tiene un gran problema: no suena original, no suena distintivo, es más de lo mismo. La sensación que tengo con este LP es que las canciones suenan con esa calidad porque, al final del día, es una banda con unas fórmulas que funcionan y que suenan con calidad tanto instrumentalmente como vocalmente pero que le falta algo que pase de “suena bien” a “es un gran tema”. Con Echo lo consiguieron, cuando no era a través de letras existencialistas que calaban hondo por uno u otro motivo era por energía pura a través de la música. A mayores tenemos que en Another Miracle, quitando casos como A Waltz o Wake Up, muchos temas caen en ciertas fórmulas ya preestablecidas de temas, perdiendo la esencia de lo que el LP de Echo. Por estos dos motivos quizás digo eso de que suena bien pero le falta alma, que no energía porque esta sí que se ve palpable.
Another Miracle es un buen regreso de la banda para quienes les guste el metalcore pero para alguien como yo que tiene en tan alta estima el recopilatorio de Echo (no se ha notado ni nada) hace que este se quede corto. Entiendo que posiblemente sea un magnum opus que se dio bajo ciertas circunstancias quizás imposibles de repetir pero es que fue tan bueno en tantos aspectos que me revienta un poco por dentro ver que fue una rara avis más que un cambio de dirección. Dejando de lado este punto, Of Mice & Men apuesta por repetir fórmulas que le funcionaron en el pasado, por aprovechar que Aaron Paulie tiene una voz melódica cojonuda y por darle un toquecito distintivo como hemos visto en el uso de elementos electrónicos. Resumiendo, un buen álbum sin muchas notas negativas y con unas cuantas que son más que positivas (sobre todo lo bien que funciona a la banda la faceta más melódica) pero que, por lo comentado, me deja ciertas sensaciones agridulces.
